PONTE A DIETA (CON ESTILO)
EL ACABADO MONOCROMO SIENTA DE MARAVILLA AL NUEVO OCTO FINISSIMO S DE BVLGARI. INGENIERÍA SUIZA Y DISEÑO ITALIANO PARA UNO DE LOS RELOJES MÁS DELGADOS DEL MUNDO
ROMANO
El Octo de Bvlgari ya se ha convertido en un icono de la relojería del siglo XXI. Inspirado en la arquitectura clásica, este elegante reloj combina de manera magistral las formas circulares y las líneas rectangulares de su caja con un estilo que nos recuerda a las cúpulas de los antiguos templos romanos. Fue presentado en 2012 y durante este tiempo ha sabido evolucionar hasta alcanzar su cumbre estética en su versión Finissimo, una serie que ha permitido a Bvlgari arrasar en la lista de récords de relojes más delgados del mercado.
RESISTENTE
Disponible en acabados de oro y cerámica, Bvlgari amplió la colección el año pasado con la versión Octo Finissimo S, con caja y brazalete en acero (S de
steel). Sin perder su elegancia, el Octo Finissimo S aportaba un componente más práctico. El grosor llegaba hasta los 6,4 mm: apenas 1 mm de más que permitía aumentar la hermeticidad del reloj hasta los 100 metros frente a los 30 de la primera versión. En cualquier caso, sigue siendo extremadamente delgado y luce impoluto en la muñeca gracias a su diámetro de 40 mm.
DE RÉCORD
Para conseguir un reloj tan fino es necesario que el mecanismo de su interior sea muy delgado, un arte en el que Bvlgari se ha convertido en el gran referente del mercado, con permiso de Piaget y JaegerLeCoultre. El Octo Finissimo S lleva un calibre de apenas 2,23 mm de grosor, como una moneda de un euro. La energía se la otorga un microrrotor de platino y le permite funcionar de manera ininterrumpida durante 60 horas. Gracias al fondo transparente de la caja es posible ver la cuidada decoración de este extraordinario movimiento.
MONOCROMO
Hasta ahora estaba disponible en acabado azul o negro. La oferta se amplía con la versión plateada y nos atrevemos a decir que es la versión más fardona. El equipo de diseño de Bvlgari se ha encargado de que la esfera tenga el mismo acabado cepillado que vemos en el acero del bisel y el brazalete. El plateado de los índices, las elegantes agujas caladas y el segundero, colocado en una curiosa posición asimétrica, consiguen que todo el reloj tenga un conjunto armónico.
ÚNICO
El brazalete del Octo Finissimo es una de las grandes creaciones conseguidas por Bvlgari en los últimos diez años. Fue todo un reto desarrollarlo dadas las limitaciones del grosor de la caja. El modo en el que se integra el cierre desplegable en su interior es un maravilloso ejercicio de ingeniería. Esta versión en acero está únicamente disponible con este tipo de brazalete. Su precio es de 12.300 euros.