MANO GANADORA

MUY SIMILAR EN TECNOLOGÍA AL MODEL 3,

PERO MÁS POTENTE Y CON UN ESPACIO SUPERLATIVO. ASÍ ES EL MODEL Y, EL ‘CROSSOVER’ QUE LE FALTABA A TESLA

PARA TERMINAR DE ARRASAR POR ANA PÉREZ

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Llego a recoger mi Tesla Model Y al concesionario un viernes antes de mediodía y, al entrar en el parking

elevado, veo que hay una docena de coches nuevos, varios de ellos Model Y, que están siendo entregados a sus nuevos dueños. El concesionario parece una tienda de tecnología de diseño: hay más puestos con ordenadores que coches de exposición y sus comerciales se parecen más a un vendedor de Apple que a uno de coches, y no es por casualidad. La mayoría están explicando a sus clientes el funcionamiento de su centro de mando, la tableta de 15 pulgadas que preside el salpicadero, que en el Model Y abre hasta la guantera. Además, ahora incorpora un nuevo sistema operativo que se parece más aún al de un smartphone y permite que te bajes apps como Twitch o Netflix.

Me meto en mi Model Y y certifico mis sospechas nada más entrar: es bastante más grande que el

Model 3 y, aunque el diseño interior es calcado, este es mucho más espacioso. Solo los maleteros (tiene uno delantero extra, donde estaría el motor térmico) encierran 971 litros, ampliables a 2.158. Y la distancia entre las plazas traseras y las delanteras es perfecta. Eso sí, el confort de los asientos traseros es mejorable. El propulsor, en realidad, calza dos motores eléctricos, uno en cada eje, que juntos obtienen el equivalente a 514 CV tradicionales. Es un verdadero cohete, pero si lo forzamos en carretera su autonomía no cumple los 610 kilómetros anunciados. Lo compensa la rapidez del supercargador, que permite llegar al 80% en 30 minutos. Eso sí, si se te han puesto los dientes largos, solo será tuyo a partir de 64.980 €.