Capturan una serpiente venenosa en el patio de contenedores del Puerto de Algeciras
El Seprona traslada una cobra escupidora de cuello negro, especie natural de África, al Zoo de Castellar
El transporte global de mercancías por barco deja, en ocasiones, episodios de animales que viajan a miles de kilómetros de su hábitat como “polizones” involuntarios. El ejemplo más claro se encuentra entre las algas y especies marinas que se introducen en la zona mezcladas con las aguas de lastre pese a las prohibiciones internacionales, si bien en la noche del martes el hallazgo de unos portuarios en el patio de contenedores de APM Terminals del Puerto de Algeciras rompió todos los esquemas.
Sucedió al filo de las 21:30, cuando varios trabajadores vieron entre las hileras de contenedores de la zona 8B una gran serpiente de color negro que encendió todas las alarmas. La localización del animal, con una longitud aproximada de un metro y medio, forzó el cierre de parte del patio de contenedores a la espera de medios para cogerla.
El reptil, identificado provisionalmente como una cobra escupidora de cuello negro (especie venenosa) fue finalmente capturada ayer al mediodía por una patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. Una vez asegurada, fue llevada al Zoo de Castellar, donde un biólogo efectuó la primera aproximación sobre la especie y su grado de peligrosidad. La cobra escupidora de cuello negro, oriunda del África subsahariana, pudo llegar adosada a un contenedor de mercancías. No es mortal de necesidad, pero su picadura y veneno pueden provocar mareos y necrosis de los tejidos.
No es el único caso. Recientemente, un contenedor llegó al Puerto de Algeciras plagado con arañas y tuvo que ser confinado y fumigado antes de seguir su ruta.
APM Terminals, concesionaria de la terminal en la que se produjo el incidente, no ofreció información sobre la gestión del caso a los requerimientos de este periódico.