Isabel II está en Balmoral y Máxima de Holanda en La Haya
El verano de la pandemia afecta también a la vida del resto de las casas reales, que en su mayoría han optado por pasar las semanas de vacaciones en algún palacio dentro de cada país. Es el caso de Guillermo de Orange y su familia. El rey neerlandés y su esposa Máxima se encuentran con sus tres hijas en La Haya, en el renovado palacio de Huis Ten Bosch, que fue sometido a una reforma reciente, con polémica sobre los fondos públicos destinados a la decoración de las estancias privadas. Es un atemperado destino para el grueso del descanso de los reyes de Holanda que también tienen previsto unos días en Grecia, vacaciones para las que adquirieron un yate de dos millones de dólares y que estará atracado en un puerto cercano a Kranidi, donde los Orange cuentan con una mansión adquirida por deseo de Máxima.
Con un espíritu más convencional, la monarca británica se encuentra desde hace unos días en la finca de Balmoral, en Escocia. Isabel II y Felipe de Edimburgo, que a sus 99 años ya se encuentra totalmente retirado de sus obligaciones de agenda, pasaron un confinamiento muy reservado y ahora han mantenido las estrictas medidas de seguridad en la residencia estival. El castillo de Balmoral es el
tradicional destino para la reina inglesa, que recibirá la visita de algunos familiares pero sin grandes reuniones.
La familia real sueca sigue en Estocolmo y la reina Margarita de Dinamarca ha vivido unos días de preocupación por el estado de su hijo el príncipe Joaquín, que ha sido dado de alta del ictus que sufrió en Francia.
Los reyes noruegos, Harald y Sonia, han elegido otro destino local y pasan estos días en el palacio de Hovedøya, con la visita del príncipe Haakon y MetteMarit de quienes se criticaba que optaran siempre por el extranjero.