EL 31% DE LAS NUEVAS INFECCIONES DE VI H SE DIAGNOSTICARON EN MENORES DE 30 AÑOS
La reducción del retraso diagnóstico constituye uno de los principales retos de la respuesta a la epidemia del VIH en todo el mundo
EN el mundo, desde el comienzo de la epidemia del VIH, 76 millones de personas han contraído el virus del VIH y alrededor de 33 millones de personas han muerto a causa del SIDA. En el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, que se celebra hoy, los expertos inciden en la importancia de la detección precoz de la enfermedad ya que su retraso constituye uno de los principales retos de la respuesta a la epidemia del VIH en todo el mundo.
Para conocer más acerca de la enfermedad y de su incidencia en la sociedad, Grupo Joly ha entrevistado a varios expertos que desvelan los principales retos ya superados del diagnóstico de la enfermedad y todo lo que aún queda por hacer.
Solo en Andalucía, el pasado año se notificaron más de 500 nuevas infecciones del virus de las que el 83% fueron hombres, y sorprende que, a pesar de la gran cantidad de información que existe sobre el VIH, más del 50% de las nuevas infecciones se produjeron en personas entre los 30 y 50 años y un 31% se diagnosticaron en jóvenes menores de 30 años. Aunque la incidencia de la epidemia ha descendido desde su pico máximo en los años 90, aún queda mucho trabajo por hacer para erradicar la enfermedad ya que, los datos proporcionados por la Organización Mundial de la Salud, revelan que el 79% del conjunto total de personas con VIH tenía la carga viral indetectable.
El doctor Francisco Javier de la Torre es el director del Plan Andaluz frente al VIH/SIDA e ITS, médico especialista en medicina interna/enfermedades infecciosas y uno de los mayores defensores de la importancia de la detección precoz para frenar el avance de la enfermedad. Gracias a este plan todos los centros sanitarios públicos de Andalucía garantizan la asistencia a las personas con infección por el VIH, así como su acceso al tratamiento antirretroviral y a las terapias de las comorbilidades.
Pero, aún quedan grandes retos que superar y por eso, el dr. de la Torre avanza que en la actualidad trabajan tres grandes líneas: mejorar las estrategias de prevención del VIH, llegando a los colectivos sensibles usando sus canales de comunicación; reducir la elevada tasa de diagnóstico tardío, y el abordaje integral y multidisciplinar del VIH y las necesidades derivadas de la cronicidad de la enfermedad.
Para el especialista, “tenemos que actuar antes y ello implica mejorar todas las actividades de prevención tanto en cantidad como en calidad: consolidar la ‘PrEP’ como estrategia preventiva, diagnosticar precozmente y tratar rápidamente a todos los diagnosticados para así evitar la posibilidad de transmisión y mejorar los datos y la coordinación entre los distintos expertos implicados para así disponer de la información mas precisa y poder tomar las medidas más adecuadas”. Además, recuerda que “no podemos olvidar la lucha contra el estigma del VIH y la discriminación que tanto afectan al bienestar emocional y la salud mental de las personas que viven con el VIH”.
Para mejorar las tasas de diagnóstico, el Plan Andaluz frente al VIH/Sida ha impulsado el Programa de diagnóstico precoz del VIH en el ámbito comunitario que supone la realización de test rápidos de detección de anticuerpos de VIH, tanto en fluido oral (saliva) como en sangre obtenida mediante dígitopunción, en asociaciones y entidades andaluzas que desarrollan su trabajo en el ámbito del VIH/sida.
Además, el dr. de la Torre apunta que se “va a empezar a implementar el programa FOCUS, que ofrece la posibilidad de sistematizar la detección de las infecciones por VIH en atención primaria al integrar en el circuito clínico rutinario las pruebas de cribado. También se está trabajando con el Plan Andaluza de Urgencias y Emergencias para poner en marcha estrategias de diagnostico precoz en VIH en las urgencias”.
SERVICIOS DE URGENCIAS, UN PILAR CLAVE
Puesto que los Servicios de Urgencia son la principal puerta de entrada de los pacientes que desconocen su enfermedad, los expertos aseguran que la implantación de protocolos de actuación en estas áreas, permitiría mejorar la asistencia y utilizar una misma metodología de actuación en todas las áreas sanitarias andaluzas así como, la siempre necesaria, coordinación con otros servicios.
Para Amparo Fernández de Simón, presidenta regional de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) en Andalucía, “está demostrado que si queremos avanzar no basta con hacer lo mismo. Los Servicios de Urgencias juegan un papel primordial en los cambios de las estrategias que permiten mejorar los resultados”.
La experta asegura que cuentan con una posición privilegiada para poder detectar la enfermedad en aquellos pacientes que desconocen tener la infección. Según explica Fernández de Simón, “ante un paciente que no conoce que esta infectado por VIH y acude por otro motivo de consulta diferente, el hecho de que el médico de urgencias esté concienciado con este problema y la posibilidad de aplicar los protocolos (realizados con el consenso de la Sociedad de Medicina de Urgencias y Emergencias y la Sociedad de Enfermedades Infecciosas), permite que el paciente pueda tener un diagnóstico precoz, las pautas a seguir, así como la posibilidad de evitar nuevos contagios y una posibilidad de tratamiento en fases más precoces”.
VIH Y COVID-19
El COVID-19 ha cambiado nuestras vidas, ha modificado nuestros hábitos y ello afecta también a las personas con VIH. Aunque aún es pronto para tener datos de diagnostico de VIH en los tiempos de COVID, estimaciones iniciales internacionales indican que las infecciones de transmisión sexual se mantienen. Como explica el doctor de la Torre, “en cuanto a la calidad de vida no hay datos sólidos que sugieran que las personas que viven con VIH corren un mayor riesgo de adquirir el SARS-CoV-2 o de desarrollar un COVID-19 más grave si lo adquieren, especialmente si su sistema inmunológico no está comprometido. Sin embargo las personas con otras enfermedades asociadas y/o un sistema inmunológico más débil pueden ser más vulnerables a la infección por COVID-19”.