La obesidad y el sobrepeso suponen un factor de riesgo ante el Covid-19
● Especialistas en Endocrinología y Nutrición creen que las personas obesas deberían priorizarse en la vacunación ● El 73% de los hospitalizados tenían obesidad o sobrepeso
Al comienzo de la pandemia se hablaba de que ciertas patologías suponían un mayor riesgo ante el Covid-19, como la diabetes o la hipertensión. Una vez acumulados más datos y experiencia se ha visto que una de las patologías que más impacto tiene es precisamente la obesidad. Y es que tener un índice de masa corporal elevado no es una característica física, es una enfermedad. Una que no solo supone más riesgo ante el Covid-19, sino también a tener otras patologías asociadas, como enfermedades cardiovasculares, o incluso cáncer, que también tienen un mayor riesgo ante la misma.
De hecho, según estudios de Estados Unidos, la suma de pacientes con obesidad y con sobrepeso suponían el 73% de los pacientes hospitalizados por Covid. Es por ello que, expertos de la Sociedad Española de Obesidad (Seedo) y la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) insisten en que las personas con obesidad deben priorizarse en la vacunación contra el coronavirus. En concreto, según Albert Lecube, vicepresidente de Seedo, tras los sanitarios y las personas mayores, las personas obesas, en especial aquellas con un IMC mayor de 35, deberían incluirse en los siguientes grupos de vacunación.
Por su parte, Javier Escalada, presiente de la SEEN, insistía en que la obesidad no solo supone un mayor riesgo de ingreso, sino también de morbimortalidad asociada a el Covid-19. “En términos de mortalidad, las personas obesas menores de 50 años, pero con un IMC de 40, tenían una tasa de mortalidad del 8%, es decir, que esta se multiplica casi por tres respecto otros pacientes”.
Respecto al por qué de estas cifras, aportaba algunas claves Ana de Holanda, miembro de la SEEN. La experta aclaraba que la obesidad supone un estado de inf lamación leve constante, que puede agravarse con la inflamación producida por el Covid. Asimismo, la respuesta inmunitaria de estos pacientes está reducida, sumándose al hecho de que el tejido adiposo puede comportarse como un reservorio del virus. Para terminar, hay que tener en cuenta que la obesidad deja menos espacio para que el diafragma se expanda, lo que puede hacer que estas personas tengan mayor necesidad de soporte respiratorio.
Además de incluir la obesidad en las patologías de riesgo de cara a la vacunación, los expertos apuntan la necesidad de concienciar sobre la importancia de tener un peso sano de cara a mejorar el impacto de el Covid-19. No obstante, la mitad de la población española ha ganado entre 1 y 3 kilos de peso durante el confinamiento, a causa de la no adecuación a la dieta y sobre todo por la disminución de actividad física. Aunque los expertos señalaban que precisamente el paciente con exceso de peso es el que más peso ha ganado. No hay que olvidar que el 22% de la población adulta española es obesa, un porcentaje que llega al 18% en la población infanto-juvenil. Así, en el caso concreto de los pacientes con obesidad, estos no solo han ganado peso, sino que también han aumentado sus trastornos alimentarios, o la aparición de enfermedades respiratorias, articulares y relacionadas con la salud mental. Además, solo el 12% de los pacientes obesos han conservado sus programas de cirugía bariátrica. El 98% de los pacientes dice haber empeorado su enfermedad. Por todo ello, la conclusión de los expertos es que al igual que se da importancia a la higiene de manos y a la distancia social, controlar el peso en unos niveles saludables, debería ser una de las recomendaciones en la prevención del Covid-19.