UNICAJA ALUMBRA EL QUINTO BANCO ESPAÑOL
CON un volumen de activos de 109.000 millones de euros, el quinto banco más importante de España operará en el futuro desde Andalucía. Son los números del resultado de la fusión por absorción de Unicaja Banco sobre Liberbank, una operación que ha necesitado dos años para gestarse. Una gran noticia para esta comunidad autónoma, que ve cómo su principal institución económica conserva sus raíces y amplía su influencia en el sistema financiero nacional. La nueva Unicaja mantiene el nombre y su sede tradicional en Málaga. Quedará implantada en un 80% del territorio y será entidad de referencia en seis comunidades autónomas. Las sinergias y complementariedad entre ambas financieras resultan evidentes. El grupo nace con casi 10.000 empleados y más de 1.600 oficinas repartidas por toda España. En un escenario con los tipos de interés en mínimos históricos y una crisis causada por la pandemia, los accionistas no han desaprovechado la oportunidad de unificar sus negocios. Los propios supervisores europeos hace meses que reclaman a la banca que afronte procesos de concentración que mitiguen los riesgos. El acuerdo cristaliza a la segunda tentativa y después de superar múltiples dificultades. La ecuación de canje impidió en 2018 el pacto. Ahora ese escollo se superó con facilidad: a Unicaja Banco le corresponderá el 59,5% de las acciones conjuntas y a Liberbank, el 40,5% restante. La Fundación Unicaja, propietaria de más del 50% de la financiera andaluza, reducirá su participación a poco más de un 30%. Suficiente como para que la entidad que preside Braulio Medel ejerza un determinante control. Pero ha sido la gobernanza la que ha obligado a apurar los plazos. Afortunadamente, las partes han cedido. Tras una transición hasta 2023, con el actual presidente de Unicaja, Manuel Azuaga, en funciones ejecutivas, su sucesor tendrá la oportunidad de confirmar a Manuel Meléndez, de Liberbank, como consejero delegado o valorar la renovación de ese cargo con sus nuevas responsabilidades. Unicaja crece en fortaleza. Su consolidación es más necesaria que nunca, para las empresas y para más de 4,5 millones de clientes.
Se trata de una gran noticia para Andalucía, que comprueba cómo una de las principales entidades financieras del país seguirá operando desde la comunidad