Piden 9 meses de cárcel para una guardia civil que se quejó del mal olor de un mando
La Fiscalía del Tribunal Militar Territorial Segundo de Sevilla ha pedido nueve meses de prisión para una agente de la Guardia Civil por injurias a un superior contra el que, en un escrito, vertió expresiones como que era “poco aseado” y despedía un “fétido olor”.
El destinatario del escrito es un comandante de la Guardia Civil que fue designado como instructor de varios expedientes disciplinarios abiertos a la agente por la supuesta comisión de “falta grave” y que ella recusó.
En el escrito, la acusada señala que “cada vez que se ha mostrado como instructor, lo ha hecho de forma descuidada, con mal olor y un cerco de sudor bastante desagradable bajo ambos brazos, manchando así toda la uniformidad de este Cuerpo y detrimentando la misma con un fétido olor”.
Los hechos se remontan a 2017 cuando la agente, destinada en Chipiona y encargada de violencia de género, recibió la orden de bajar el riesgo a una joven de la localidad que había denunciado amenazas de muerte y agresiones por parte de su pareja, a lo que ella se negó.
Este hombre, que fue detenido, también amenazó a la guardia civil y causó daños en su vehículo, por lo que ésta solicitó de sus superiores la activación del protocolo de protección a agentes de la autoridad. A partir de ese momento, la acusada, “en contra de su voluntad”, fue citada para ser evaluada por los servicios médicos de la Comandancia que, “pese a su frontal oposición”, emitió un parte de baja por estrés laboral, según el escrito de su abogado defensor.
La agente, agrega, ha sufrido una situación de “acoso y derribo” con la apertura de expedientes disciplinarios por “falta muy grave” por su negativa a reconocimientos médicos, “sin causa que lo justificase”, la mayoría de los cuales han sido archivados.