La violencia juvenil cuestiona la mano dura de Macron
El presidente francés ve acercarse en los sondeos a la ultraderechista Le Pen a un año de las urnas
El aumento de la violencia entre adolescentes ha puesto en cuestión la nueva línea de mano dura implantada por el Gobierno de Emmanuel Macron, quien, a un año de la elección presidencial, ve a la ultraderechista Marine Le Pen acercarse en los sondeos. En dos meses y medio, los sucesos trágicos que involucran a menores de edad han copado las portadas de los medios y generado preocupación al Ejecutivo, que prepara un plan para frenar las guerras de pandillas y el creciente acoso escolar.
La populosa región de Ile de France, que incluye París y su cinturón, es la más afectada. Su presidenta, la centroderechista Valerie Pecresse, desveló su plan frente ante lo que considera “los nuevos bárbaros”, en alusión a los pandilleros. Armas de fuego para los policías municipales, uso de drones para alertar de las reyertas y condicionar las ayudas sociales al comportamiento de los chavales son algunas ideas de Pecresse.
Esta misma semana los episodios de violencia sucedidos en las afueras de París han impresionado a la opinión pública gala.
Del ala más derechista del Ejecutivo, Gerald Darmanin fue la apuesta de Macron para aplicar mano dura cuando lo nombró ministro del Interior a mediados de 2020. Sin embargo, los resultados de esta apuesta no se han reflejado en un aumento del apoyo entre los votantes conservadores.
De acuerdo con un reciente sondeo, entre enero y marzo, la popularidad de Macron entre los simpatizantes de la derecha cayó 20 puntos, pasando del 54% al 34%. Con dificultades para recuperar el electorado de centroizquierda que lo votó en 2017 en caso de que se presente en 2022, Macron deja una posible beneficiada de esa tendencia, Marine Le Pen, candidata el próximo año y que se ha acercado al presidente en los sondeos como nunca antes. En una de las últimas encuestas, la ultraderechista obtendría en un hipotético segundo turno el 47% de los votos, frente a los 53% de Macron.