Un Sevilla con dudas recibe hoy a un Betis en crecimiento
● El partido de la máxima rivalidad local llega con el Sevilla y el Betis metidos de lleno en la pelea por las plazas europeas, con los verdiblancos aspirando incluso a pelear la Champions
Sevilla y Betis dirimen este domingo un nuevo duelo de máxima rivalidad, otro capítulo de uno de los derbis más pasionales de Europa y de nuevo marcado por la ausencia de sus fieles aficiones en las gradas por la pandemia, pero con el objetivo de la lucha por los puestos europeos en juego, al ser los sevillistas cuartos y los verdiblancos sextos.
Los eternos rivales sevillanos llegan a este centésimo enfrentamiento cainita de ambos en Primera División en posiciones de privilegio, quizás en un mejor momento el Betis del chileno Manuel Pellegrini, con cuatro triunfos seguidos en Liga, pero también con el bagaje de la gran campaña que está firmando el Sevilla de Julen Lopetegui, a pesar de los dos mazazos recibidos en sólo siete días.
El equipo del barrio de Nervión es cuarto con 48 puntos, con tres de renta sobre la Real Sociedad (quinto) y seis sobre el Betis, amén de tener la bola extra de su partido aplazado con el Elche, este próximo miércoles y también en casa, y pese a dos decepciones muy seguidas por su eliminación por el Barcelona en las semifinales de Copa y por el Dortmund en los octavos de la Champions, mostró una gran imagen el martes pasado en Alemania.
Dicha recuperación, al empatar a dos con el Borussia Dortmund (2-3 en la ida) después de ir perdiendo por 2-0 y buscar la prórroga hasta el último instante, rompió una racha de tres derrotas seguidas (dos ante el Barcelona –en Liga y en Copa– y la última en Liga en Elche) y ha ahuyentado la desilusión de cara a este nuevo derbi sin público, la esencia del fútbol.
En la cita deportiva más esperada en Sevilla, que desata un río de pasiones y sentimientos encontrados en familias, amigos y vecinos dependiendo de la fe balompédica de cada uno, nunca hay favoritos, un clásico al que se han aferrado ambos técnicos, Julen Lopetegui y Manuel Pellegrini, conscientes de que éste no es un partido más.
Amén de los piropos que se han regalado el uno al otro antes del derbi de los derbis, un partido con un enorme componente emocional y racial, y que puede dejar tocado al que lo pierda, el Sevilla llega muy mejorado al choque y con ganas de reivindicarse, de resarcirse de sus dos últimas y dolorosas eliminaciones en las otras competiciones. Lopetegui parece que podrá contar con su equipo de gala, aunque algunos de sus jugadores están castigados por la exigencia de una dura e intensa temporada, como el central Diego Carlos o el extremo Ocampos.
Con el meta marroquí Bono, un seguro de vida para los sevillistas, en la zaga estarán el incombustible Jesús Navas –jugará su vigésimo derbi en Primera, al igual que el capitán bético Joaquín–, Koundé, Diego Carlos y Acuña; con Jordán, Fernando y quizá Rakitic, por sus mayores galones frente a Óliver Torres o Papu Gómez, en la media; Suso, En-Nesyri –avalado por sus 13 goles en Liga y 6 en Champions– y Ocampos.
Mientras, el Betis llega al derbi en el mejor momento de su temporada tras cuatro victorias consecutivas y encaramado en la sexta posición de la tabla con 42 puntos, con el aliciente de apuntalar su candidatura europea y de acortar distancias con el eterno rival.
Sin embargo, todas estas circunstancias externas son de consumo intersemanal y quedan en agua de borrajas cuando se acerca un partido que, por su propia naturaleza, es diferente a todos los demás y suele decantarse por detalles, circunstancia de la que es consciente Pellegrini por su veteranía en estas lides.
El Betis, afianzado en su concepto desde el derbi de la primera vuelta de enero, un 1-1 que le valió mucho más que el punto, el creer en sí mismo, saldrá al Sánchez-Pizjuán con alguna modificación respecto al de su victoria ante el Alavés (3-2), con la inclusión en el eje de su defensa de Víctor Ruiz, recuperado de una dolencia muscular.
Reconocible en su zaga con dos laterales fijos, Emerson y Miranda, y el otro puesto de central para Mandi, la figura clave en el entramado defensivo bético volverá a ser Guido Rodríguez como puntal en el medio centro.
En el eje del ataque, todo apunta a que la titularidad recaerá en el jugador fichaje de la segunda vuelta bética, Borja Iglesias, quien con sus seis goles se ha erigido en una de las claves de este Betis.