Gerard reflota al submarino amarillo
● El Eibar de Mendilibar se enrosca en zona de descenso
El Villarreal rompió en Ipurúa, al ritmo de tres asistencias de Gerard Moreno, su racha de ocho partidos sin vencer y se impuso por 1-3 ante un Eibar que vendió cara su piel y no se rindió en ningún momento, pero que tuvo que claudicar en el último suspiro.
Tres pases de gol de su principal artillero, aprovechados perfectamente por Moi Gómez, a los 59 segundos, el colombiano Carlos Bacca (m.34) y Alfonso Pedraza (m.87), devuelven la sonrisa al cuadro de Unai Emery y amargan el 60 cumpleaños de José Luis Mendilíbar, técnico del conjunto vasco.
El partido empezó con fuerza, con un arrancada veloz de Bryan Gil a los quince segundos que acabó con un tiro que detuvo el portero. La réplica inmediata llegó con un magistral pase de Gerard Moreno, que culminó a la perfección Moi Gómez por el costado izquierdo.
Un error defensivo de Esteban Burgos propició un robo de Manu Triguero y un contragolpe letal de Gerard Moreno, que permitió a Bacca incrementar la ventaja.
El 0-2 ponía las cosas muy cuesta arriba al Eibar. Pero la esperanza volvió en el minuto 40 gracias a una mano del ecuatoriano Pervis Estupiñán dentro del área a un centro de Arbilla, aunque duró poco, ya que Burgos lo lanzó flojo y mal Burgos y detuvo Sergio Asenjo con el pie.
El tanto levantó los ánimos del conjunto vasco, que hizo sufrir más al Villarreal. Aún así, a la contra tuvo también sus opciones para sentenciar, pero las alarmas saltaron cuando a los 80 minutos el francés Etienne Capoue fue expulsado con roja directa por una dura entrada sobre Diop.
Esta circunstancia incitó aún más al Eibar a lanzarse al ataque, pero otra vez careció de acierto y otro contragolpe, con un gran pase de Gerard Moreno, lo aprovechó Alfonso Pedraza para sentenciar el encuentro y dar una victoria clave al Villarreal.