El Algeciras se quita la presión y fija sus miras en la Segunda
● La Balona ascenderá a la Pro si gana y Tamaraceite y Sanluqueño pierden
El algecirismo sigue en una nube. Y no es para menos. Con la resaca más dulce que se recuerda en mucho tiempo, la mayoría de los aficionados del Algeciras CF aún están haciéndose a la idea de lo que consiguió su equipo el pasado domingo tras vencer en el Municipal de La Línea. El ascenso de categoría a la nueva división del fútbol español, la Primera RFEF o la Pro para los más futboleros, es solo el principio de lo que se le viene por delante al Algeciras lo que resta de una temporada apasionante que puede desembocar con otro salto de categoría, aún mayor, a Segunda división.
El sueño es más real que nunca y está entre las posibilidades de un Algeciras CF que se ha convertido en el primer club del grupo IV-A de la Segunda B en asegurar su clasificación para la segunda fase con billete VIP. Esto quiere decir que el equipo de Salva Ballesta va a pelear para conseguir plaza en el playoff a Segunda división. Un objetivo tan ambicioso como ilusionante... Solo al alcance de los más soñadores cuando el pasado verano comenzó a tomar forma el proyecto impulsado por la directiva que preside Nicolás Andión.
El Algeciras conocerá el próximo domingo día 21 qué otros dos conjuntos le acompañan como segundo y tercero para la segunda fase de la competición. San Fernando, Sanluqueño (que visita el Nuevo Mirador), Tamaraceite y Balona, por orden clasificatorio, se jugarán los dos ansiados puestos de ascenso directo a la Pro. Los tres mejores del grupo IV-A se juntarán con los tres primeros del IV-B en una mini liga de seis en la que solo se enfrentarán con los del otro subgrupo y arrastrando todos los puntos que ya tienen. Es decir, que los tres puntos del próximo domingo ante el Sanluqueño tienen un valor extraordinario para los algeciristas.
En el otro subgrupo, el UCAM selló el domingo también su pasaporte a la Primera RFEF con 30 puntos ya que sale favorecido de todos los posibles empates. La última jornada, sin embargo, se presenta abierta y a cara de perro para Linares, Sevilla Atlético, Betis Deportivo (con el algecireño Juan Serrano), Córdoba y Real Murcia.
Toda la ventaja de puntos que el Algeciras saque ahora servirá de colchón para la segunda fase de la competición, en la que los tres primeros de cada grupo y el mejor cuarto obtendrán el pasaporte para el playoff final a Segunda.
En los otros subgrupos de la Segunda B, varios equipos velan armas ya para la ronda en la que se cruzarán los mejores: Burgos, Cultural Leonesa, Valladolid Promesas, Tudelano, Calahorra, Nástic, Ibiza, Villarreal B, Alcoyano, Sanse, Badajoz y Extremadura.
El Algeciras sueña en grande y lo hace sin presión ni obligación. La exigencia es la que ellos mismos se pongan en la fase que arrancará en abril. El hecho de afrontar la segunda parte de la temporada con los deberes hechos convierte al Algeciras en un rival más peligroso si cabe. “El infiltrado”, como lo bautizó Salva Ballesta tras ganar en La Línea, tiene muchísimo que ganar y nada que perder. Esta plantilla, esta afición y este club se han ganado el derecho a soñar con un ascenso a Segunda, un hito alcanzado por última vez en 2003 de la mano del añorado José Luis Montes.