Movilización agraria “permanente” contra el decreto de convergencia
Las protestas arrancan el viernes en Jerez y seguirán en Córdoba y en la provincia de Sevilla
Una movilización “permanente e indefinida”. Esa va a ser la respuesta del sector agrario andaluz (Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-Alimentarias) al decreto de transición de la nueva PAC (el modelo de ayudas de 2021 y 2022), que acelera la convergencia entre agricultores y ganaderos en una misma región productiva (en España hay 50 en total).
Según los cálculos de las asociaciones, con la eliminación del limite de pérdidas, de los 232.000 perceptores de ayudas, 80.000 perderán al menos un 10% en dos años y, de ellos, 40.000 sufrirán mermas de entre un 20% y 50%.
Los presentantes de las asociaciones anunciaron manifestaciones y concentraciones “casi semanales” a nivel provincial y comarcal con el objetivo de que el Gobierno retire el decreto e inicie una mesa de un diálogo para llegar a un acuerdo. Aunque el sector había afirmado que no habría manifestaciones mientras la situación sanitaria no lo permitiera, estiman que “no les queda más remedio” que llegar a este punto ante la inminente negociación de la nueva Política Agraria Común (PAC) 2023-2027, cuyo resultado puede consolidar el decreto. Además. los agricultores consideran que la norma que acelera la convergencia es la antesala de la intención gubernamental reducir en un 50% los 1.300 millones que reciben los productores andaluces en concepto de ayudas directas.
Esto sería así, entre otras cosas, por la reducción de regiones que plantea el Gobierno, que haría la convergencia entre productores aún mayor y posibilitaría un trasvase de fondos entre regiones. “Nosotros decimos que los derechos que se han generado en Andalucía se queden aquí, en manos de nuestros agricultores y ganaderos”, señala Miguel López, secretario general de COAG-A, en referencia al hecho de que cuando se hizo el reparto hace 15 años se tuvo en cuenta un histórico de producción y a Andalucía le correspondió más precisamente por eso, por producir más.
La movilización comenzará este mismo viernes en Jerez. La semana que viene, el día 25, se trasladará a Córdoba, y después de la Semana Santa llegará a Sevilla, con movilizaciones comarcales durante abril y mayo.
Las asociaciones insisten en que quieren la retirada “global” del decreto y no le ven sentido a la propuesta del Gobierno de negociar la convergencia en 2022 junto con la del resto de la nueva PAC y dejar la de 2021 tal cual. Para ellos, esta marcha atrás parcial es un reconocimiento del error que han cometido y piden que sea completa. “Se han dado cuenta de que es una convergencia brusca que perjudica al regadío, al olivar y a la ganadería sin base territorial, y están dispuestos a modificarla en 2022; modifíquenla en 2021 y así nos evitaremos muchos problemas”, señala Miguel Cobos, secretario general de UPA-A. En los últimos días, Fernando Miranda, secretario general de Agricultura y Alimentación, se ha reunido con representantes de productores en todas las provincias, pero no los ha convencido. “Le dijimos que si ha venido a contar algo nuevo o a encontrar la manera de que perdiéramos la unidad. Al final se han ido con el rabo entre las piernas, porque hemos mantenido la unidad del sector”, afirma Ricardo Serra, presidente de Asaja-Andalucía.
Los agricultores se plantean, por otro lado, promover una moción de apoyo en el Parlamento Andaluz a su causa después de que hayan impulsado mociones en los 778 ayuntamientos andaluces. Eso sí, recalcan que no quieren convertir este asunto en una cuestión política. Quieren exactamente lo contrario, convertirlo en una cuestión estrictamente sectorial. “Parece que la distinción de colores entre quien gobierna en Madrid y quien gobierna en Andalucía está jugando en contra de los intereses de los agricultores y ganaderos andaluces”, afirma Juan Rafael Leal, presidente de Cooperativas Agro-Alimentarias de Andalucía.
Prevén llevar su protesta al Parlamento andaluz tras las mociones en los ayuntamientos