El IRPF subirá al que percibió hasta 18.000 euros en ERTE y con un pagador
Los trabajadores que estuvieron en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) el año pasado y cuyos ingresos brutos del trabajo se situaron entre los 14.000 y los 18.000 euros anuales tendrán una tributación final mayor que la que les hubiera correspondido si solo hubieran tenido un pagador, cualquiera que sea su residencia en territorio común, según constató el Registro de Economistas Asesores
Fiscales (REAF).
Durante una rueda de prensa telemática para presentar las novedades estatales y autonómicas de la declaración de la Renta y Patrimonio de 2020, el REAF puso varios ejemplos con distintas rentas brutas del trabajo, entre 14.000 y 21.000 euros, comparando, por cada comunidad de territorio común, la tributación final que tendrán en caso de que hayan estado en ERTE y en el supuesto de que hubieran percibido la misma cuantía solo de su empresa.
Así, constatan que los trabajadores con ingresos brutos del trabajo de entre 14.000 y 18.000 euros cobrados de dos pagadores en 2020, pagarán más IRPF que con un solo pagador, con independencia de donde tengan su residencia.
“Esto se produce porque en ese intervalo de rentas se aplica la reducción por rendimientos de trabajo, que produce una gran progresividad, progresividad que se corrige por el reglamento para el cálculo de retenciones.