ONG denuncian el abandono de las víctimas de un naufragio en el Mediterráneo
Las más de cien personas que perdieron la vida en un naufragio ocurrido en el Mediterráneo Central fueron abandonadas por los Estados que podían salvarlas, pues no movilizaron ningún medio para rescatarlas a pesar de haber sido alertadas dos días antes del peligro que corrían, denunciaron ayer organizaciones humanitarias, así como organismos internacionales.
“Si se hubiera estrellado un avión de pasajeros hubieran acudido las Armadas de media Europa, pero sólo eran emigrantes, estiércol del cementerio mediterráneo, para quienes no vale la pena correr, y de hecho nos quedamos solos”, resumió Alessandro Porro, presidente de SOS Méditerranée y miembro de la tripulación del barco de la ONG francesa que avistó “un mar de cadáveres”.
El Ocean Viking acudió el jueves, junto a tres mercantes, al rescate de dos barcazas tras ser alertada por Alarm Phone,
Libia, Malta e Italia no movilizaron ningún medio para rescatar a los migrantes
un servicio telefónico de ayuda a los inmigrantes, que ya desde el miércoles, cuando se puso en contacto con los migrantes en peligro, había intentado sin éxito que las autoridades de Libia, Malta e Italia ayudaran a rescatarlas.
Era “una balsa con 120 personas. O cien, o 130. Nunca lo sabremos porque todas están muertas”, se lamentó Porro, que también llamó insistentemente durante dos días a las autoridades de los países del Mediterráneo que para que enviaran barcos de rescate, pero ninguno respondió, tal y como denunció la Organización Mundial para las Migraciones (OIM).
“Éstas son las consecuencias humanas de las políticas que no respetan el derecho internacional y los imperativos humanitarios más básicos”, escribió el director de la OIM, Antonio Ambrosi, en redes sociales, poco después de conocerse el naufragio, mientras la portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (Unchr), Carlotta Sami, se preguntó que cuándo será suficiente.