Tensa calma entre España y Marruecos tras la salida del líder del Frente Polisario
La marcha de Gali tras declarar ante el juez Pedraz abre otro incierto capítulo en la relación bilateral
La salida de España del líder del Frente Polisario, Brahim Gali, para terminar su recuperación en un hospital de Argelia ha abierto un paréntesis de tensa calma entre España y Marruecos, que mantienen sus posiciones respecto de la crisis que les enfrenta y en la que ambos reclaman “confianza y respeto” como base para una buena relación de vecindad.
Así, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, reiteró ayer que las relaciones con Marruecos “tienen que ser buenas”, pero deben estar basadas en “la confianza y el respeto”, y además subrayó que “en nada ha cambiado” la posición de España en relación al Sahara.
También el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, expresó su deseo de que se mantenga la “intensa” cooperación con Marruecos, un país “con el que las relaciones siempre se han basado en la buena vecindad y en la cooperación, y evidentemente en el respeto mutuo”. “En la vida tenemos que tener siempre no solo la vista corta sino también la vista larga y yo creo que está claro que nuestros intereses, como no puede ser de otro modo desde el punto de vista estratégico, conf luyen claramente”, subrayó.
Unas horas antes, de madrugada, despegaba de Pamplona un avión argelino con el líder del Frente Polisario, Brahim Gali, a bordo camino de Argel para proseguir su recuperación tras declarar por videoconferencia ante un juez de la Audiencia Nacional por presuntos delitos de lesa humanidad, genocidio y torturas.
Tras tomarle declaración, el juez Santiago Pedraz rechazó enviarle a prisión provisional o retirarle el pasaporte y optó por dejarle libre y sin medidas cautelares en su contra, aunque ha acordado que aporte un domicilio y un teléfono para estar a disposición de la Justicia.
El Gobierno marroquí no se ha pronunciado todavía sobre los acontecimientos de estas últimas horas salvo por la agencia oficial MAP que anoche dedicó un largo artículo a lo que llamó “una parodia de Justicia” (la española).
El artículo llega a definir lo sucedido ayer en la comparecencia a Gali como “una audición expeditiva para cargos dignos del proceso de Nuremberg, sin ninguna atención a las víctimas por parte de la Fiscalía ni del juez de la Audiencia Nacional”.
La agencia oficial marroquí MAP critica lo que llama “parodia de la Justicia española”