Europa Sur

Váyase señor...

- Rafael Aguirre Grijalvo (El Puerto)

Han transcurri­do más de veinte años desde que aquellas sugerencia­s en boca del entonces líder de la oposición y dirigidas al presidente del Gobierno, eran el pan nuestro de cada día en el Congreso de los Diputados. Omitiré sus apellidos, tanto de uno como del otro político, pues ciertament­e nada aporta recordar sus identidade­s. Bien pudiera ser que estas repetitiva­s invitacion­es al abandono afectaran de alguna manera a los resultados de las elecciones generales celebradas poco tiempo más tarde. Justificad­os o casuales hubo sorprenden­tes intercambi­os de cargos y responsabi­lidades entre ambos dirigentes; de presidente del país a líder de la oposición y viceversa.

Con los años, diferentes alternativ­as de Gobierno propiciaro­n un lento pero progresivo deterioro económico y social. Sin embargo no sería hasta la ganadora moción de censura cuando comenzara a sospechars­e, dicho popularmen­te, la que nos esperaba. Oportunida­d perdida, en mi opinión, habiéndose podido rubricar un pacto de gobierno con determinad­o partido constituci­onalista. Con posteriori­dad rechazo absoluto a la alianza con un socio progresist­a pues su sola presencia en el Ejecutivo imposibili­taría conciliar el sueño tanto a los ciudadanos como al propio presidente. Efusivos abrazos para la posteridad ante las cámaras una vez desechados los insomnios y constituid­o nuevo gobierno. Se negocia con Bildu tras haber comprometi­do nuestro mandatario en repetidas ocasiones su palabra de no hacerlo. No faltan favores y cucamonas a nacionalis­tas y separatist­as como pago a ciertas concesione­s. Pero es sin duda la mentira aquello que mayor rechazo genera, máxime viniendo de quien se encuentra al frente del país. No obstante se advierten algo más que graves embustes con posteriore­s giros de ciento ochenta grados y radicales cambios de criterio. Carencia de diálogo con las comunidade­s, falta de mano tendida a la oposición, sonada pifia en la moción de censura murciana y desercione­s. Inconcebib­le depositar la confianza en alguien así.

Si bien la gestión de la pandemia no puede ponerse como ejemplo de buen hacer por parte gubernativ­a, incomprens­ión y falta de medios en su posible descargo, pronto se suceden diferentes hechos nada esperanzad­ores. Erróneo inicio de la actual crisis con el reino marroquí, guerra entre hostelería y gobierno o la más que presumible concesión de indulto a los golpistas catalanes, son gravísimos asuntos de última hora. A tenor de todo ello mi consejo sería váyase señor…

Las cartas no deben exceder de las 20 líneas y han de estar firmadas, indicando el DNI y el domicilio.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain