Sánchez y Aragonès escenifican el diálogo espoleados por Junqueras
● El presidente del Gobierno aboga por aparcar “posturas maximalistas” y el jefe del ‘Govern’ elogia los “pasos” de Moncloa ● El líder de ERC bendice los indultos y renuncia a la vía unilateral
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonès, escenificaron ayer su apuesta por abrir una nueva etapa de diálogo para resolver el conflicto catalán, el mismo día en que el líder de ERC, Oriol Junqueras, bendecía los indultos y cuestionaba la unilateralidad. Tras un primer contacto telefónico el viernes pasado y a la espera de fijar una reunión formal para este mismo mes en la Moncloa, que servirá de antesala para la reactivación de la mesa de diálogo entre gobiernos, Sánchez y Aragonès coincidieron ayer en Barcelona por primera vez desde la investidura del republicano.
Fue en un foro empresarial, durante la condecoración al editor Javier Godó por parte de la gran patronal catalana, Foment del Treball.
En su discurso, que empezó con un “estimado Pere”, Sánchez abogó por aparcar “posturas maximalistas” para que las diferencias “no se transformen jamás en parálisis, atraso y enfrentamiento”, y de este modo buscar acuerdos que permitan superar el procés, avanzar hacia el “reencuentro”
y recuperar “la concordia” en Cataluña.
“Hemos vivido demasiado tiempo encerrados en posiciones estrechas, en callejones sin salida. No podemos seguir así: ha llegado el momento de dar pasos que nos permitan de una vez por todas avanzar y hacerlo con decisión, con serenidad y con un enorme sentido de justicia, buscando en todo momento el beneficio, la tranquilidad, la paz y la convivencia del conjunto de la ciudadanía por encima de la pequeñez de los intereses partidistas”, dijo.
También Aragonès apeló al “diálogo” para abrir una “nueva etapa de normalización política” y elogió los “pasos” dados hasta ahora por el Gobierno, que “nunca antes se había reconocido la necesidad de abordar la resolución de un conflicto de esta naturaleza”.
Así, pese a que los ejecutivos catalán y central “probablemente difieran en los análisis de normalidad”, y “siendo conscientes de las dificultades” que ello entraña, toca “afrontar una nueva etapa y poner soluciones sobre la mesa” y “escuchar todas las propuestas, con igual respeto y consideración”.
Fuentes del Gobierno catalán detallaron que en ningún momento hablaron de cuestiones como los eventuales indultos a los dirigentes independentistas condenados del procés.
La portavoz republicana, Marta Vilalta, precisó por su parte que la renuncia a la vía unilateral que solemnizó Junqueras no implica una “renuncia” a “ninguna vía democrática”, sino que significa que ERC “prioriza” la del diálogo para conseguir un referéndum pactado.
Más distante se mostró la portavoz y vicepresidenta de JxCat, Elsa Artadi, quien reclamó no renunciar “a ninguna vía” para conseguir la independencia, y recordó a su socio en el Govern que el 1-O fue “unilateral”.
Desde el Ejecutivo central, el primero en valorar el paso de Junqueras fue el ministro de Transportes, José Luis Ábalos,
Pedro Sánchez Presidente del Gobierno
Hemos vivido demasiado tiempo en callejones sin salida, no podemos seguir así”
Pere Aragonès Presidente de la Generalitat
Nunca antes se había reconocido la necesidad de abordar la resolución de este conflicto”
quien aseguró que el Gobierno no va aceptar la vía escocesa de un referéndum pactado que ha planteado el líder de ERC, pero admitió que los independentistas puedan plantear cualquier medida si es en el marco de la legalidad. “Nuestra posición es conocida: no estamos por ese referéndum, sino por conservar la integridad territorial de España”, remarcó Ábalos en declaraciones a La Sexta.