Un ensayo desfigurado
● España cumple con la última prueba para la Eurocopa en un duelo ante Lituania desvirtuado por el positivo de Busquets y que disputarán los sub 21
El amistoso frente a Lituania en Butarque no se parecerá en nada a lo que iba a ser para la selección española, transformado en un partido tan desfigurado por el efecto directo del positivo por Covid-19 de Sergio Busquets como intranscendente para la preparación para la Eurocopa 2020, limitado a los futbolistas del combinado sub 21.
La detección el domingo del positivo del capitán, en las pruebas PCR a las que había sido sometido esa misma mañana, desató una vorágine en la concentración en
Las Rozas, con los jugadores sometidos ayer a nuevos test, confinados, limitados a entrenamientos individualizados y apartados del duelo de este martes, que iba a ser la última puesta a punto.
Y ya sin Busquets, que abandonó el domingo el alojamiento para quedar aislado en su domicilio, pendiente de su evolución para conocer si estará o no apto a partir de la segunda jornada de la Eurocopa 2020, pero también de si Luis Enrique decide o no antes del sábado llamar a alguien en su lugar. Eso imposibilitaría su participación en el torneo. Es baja segura en el debut ante Suecia dentro de una semana en el estadio de La Cartuja.
Mientras se verifica la dimensión del positivo dentro del equipo con la repetición de PCR (los otros 23 jugadores dieron negativo en las pruebas dominicales), si se queda en un único contagio o hay alguno más dentro de la burbuja de medio centenar de personas que había diseñado la Real Federación Española de Fútbol en la Ciudad del Fútbol para el torneo, toda la selección absoluta está confinada, el protocolo de actuación que exigen las autoridades sanitarias ya está en marcha y el partido de hoy sigue en pie, pero no se parece en nada.
Ni en las circunstancias ni en el motivo previsto –la preparación para la Eurocopa 2020– ni en el técnico, Luis de la Fuente, ni en ninguno de los futbolistas que van a jugarlo, que han pasado de los convocados por Luis Enrique para la competición continental a los sub 21 que acaban de terminar el Europeo de la categoría, eliminados en las semifinales del jueves por Portugal (1-0). Sin disponibilidad de ninguno de los 23 jugadores que ahora integran la selección absoluta por todos esos motivos, la
Federación recurrirá al equipo inmediatamente inferior para cumplir con el amistoso ya pactado.
Los porteros Josep Martínez, Álvaro Fernández e Iñaki Peña suplirán a Unai Simón, Robert Sánchez y De Gea y los defensas Óscar Gil, Mingueza, Miranda, Cuenca, Guillamón, Pozo y Cucurella reemplazarán a Marcos Llorente, Azpilicueta, Jordi Alba, Gayá, Laporte, Eric García, Diego Llorente y Pau Torres. En el centro del campo Zubimendi, Gonzalo Villar, Fran Beltrán, Manu García y Antonio Blanco ejercerán de Busquets, Rodrigo, Koke, Thiago Alcántara, Fabian Ruiz y Pedri, mientras que los atacantes Brahim Díaz, Abel Ruiz, Bryan Gil, Puado y Yeremy Pino actuarán por Morata, Gerard Moreno, Adama Traoré –que ultimaba su puesta a punto de unas molestias–, Dani Olmo, Pablo Sarabia, Ferrán Torres y Oyarzabal.
Son los 20 futbolistas con los que se ha transformado desde el primer jugador hasta el último la
La RFEF tuvo que recurrir a De la Fuente para la cita y volvió a llamar a sus jugadores
lista de España para el encuentro, hasta tal punto que, entre las decisiones de la RFEF, también se ha adoptado la medida de devolver al público “íntegramente el importe de la entrada a todos aquellos que lo deseen y lo comuniquen” o reintegrar un “20% del mismo” a quienes vayan al estadio.
En lo deportivo, el transtorno es evidente. Y múltiple. Luis Enrique pierde a Sergio Busquets al menos frente a Suecia, sus entrenamientos pasan de colectivos, con lo esencial que son en un deporte como el fútbol y más aún cuando se aproxima a una semana vista la Eurocopa 2020, a individualizados y, sobre todo, pierde un amistoso para rodar, probar y afinar a sus jugadores para el torneo.
Cuando se produzca el debut ante Suecia, cuanto menos, habrá futbolistas que encadenarán nueve días sin jugar ningún encuentro, pero habrá otros más que tal inactividad competitiva irá más allá, porque no dispusieron de minutos en el primer amistoso y sí iban a tenerlos en el segundo.
Entre todos esos condicionantes y circunstancias, enfrente estará Lituania, una selección menor y superada en cada uno de los cinco encuentros que ha disputado en 2021, doblegada por Suiza, Italia, Kosovo, Estonia y Letonia de forma sucesiva. En el ciclo de tres años del Mundial 2018 a la Eurocopa 2020 –no se clasificó para ninguno de los dos–, ha sufrido 20 derrotas. Jamás ha ganado a España en sus seis enfrentamientos: 5 derrotas y un empate.