Juicio por la muerte de una joven apuñalada en El Rinconcillo en 2019
● La Fiscalía acusa a los dos implicados de homicidio e intento de homicidio ● La acusación eleva los hechos a asesinato
La sección de Algeciras de la Audiencia de Cádiz acoge desde ayer el juicio con jurado por la muerte en enero de 2019 en la barriada de El Rinconcillo de Natalia B.G., una joven de 20 años, a consecuencia de una puñalada que recibió en el transcurso de una discusión en la que participaron de madrugada varias personas.
La Fiscalía acusa a los dos implicados, una pareja formada por un hombre y una mujer, de homicidio e intento de homicidio, respectivamente, mientras que la acusación particular eleva la calificación de los hechos a asesinato con alevosía e intento de asesinato.
La defensa del acusado, un ex guardia civil retirado desde 2005, admite que la víctima murió a causa de una puñalada, pero apunta que esta fue accidental y en una acción de legítima defensa protagonizada por su cliente al verse atacado. En el caso de la mujer acusada, no ejerce calificación.
Los hechos, que causaron un profundo impacto social en la popular barriada algecireña, se remontan a la madrugada del 19 de enero de 2019, tras una disputa previa entre la acusada M.I.M.R., pareja del también acusado J.A.M.M., y una amiga de la víctima en el pub Menphis, en El Rinconcillo.
Según la Fiscalía y la acusación particular, al poco de la disputa, el acusado fue sorprendido por un amigo del novio de la víctima rajando con un cuchillo las ruedas de un vehículo. El acusado huyó hasta su domicilio, a escasos metros del local de ocio referido.
Natalia, junto a su amiga, seguidas de la pareja de la víctima y del propietario del vehículo, se personaron en dicho domicilio con la intención de recriminar a J.A.M.M. Este salió esgrimiendo un cuchillo de grandes dimensiones (20 centímetros de hoja), mientras que M.I.M.R. hizo lo propio con dos cuchillos en las manos. El acusado, sin mediar palabra, se abalanzó con el cuchillo hacia uno de los hombres con ánimo de acabar con su vida, aunque este pudo repeler la acción, según el relato de la acusación.
Entonces intercedió la fallecida, momento en el que el acusado, “alzando el cuchillo que portaba en la mano, le asestó una puñalada en la zona abdominal con clara intención de segarle la vida, propósito que consiguió”. Natalia murió en el Hospital Punta deEuropa sobre las 7:20 de ese mismo día a consecuencia de una cuchillada de 3 centímetros de ancho que le había seccionado la arteria ilíaca.
Tras llevar a la víctima hasta el hospital, su pareja y amigos dieron aviso a la sala del cuerpo de la Policía Nacional a las 6:30, que se trasladó al lugar de los hechos. Al llegar, los agentes se encontraron a la acusada sentada en la acera próxima a su domicilio con dos cuchillos en sus manos y al acusado con el cuchillo antes descrito, con restos de sangre de la fallecida.
Para la defensa del acusado, este no actúo con ánimo de causar la muerte de ninguna persona, ya que “su único ánimo fue defenderse de la agresión que estaba sufriendo, acrecentada por su toxicomanía y dependencia a sustancias estupefacientes”.
La víctima, según esta versión, “se interpuso alcanzándola el cuchillo fortuitamente”. La defensa de la acusada, en la misma línea, argumenta que no intervino en la muerte de Natalia ni intentó tampoco agredir a nadie más.