Vacunas y falta de previsión

Aunque nos diga la señora Darías, profana en la materia, que la vacunación va como un ‘tiro’ pero sin pólvora, es verdad que la mayoría de la tercera edad se encuentra ya vacunada con ambas dosis pero los enfermos crónicos no y si tratamos entre los 40 y los 50, alrededor de 8 millones, hay tal cacao que ya veremos cuándo se cumplen los cálculos de ese 70% para finales de agosto y si algunos lo vamos a conocer. Los muy mayores solo podemos decir que hemos cambiado vacunas por atenciones primarias o médicos familia que antes se decían de cabecera. No hay forma de ponerse en contacto con quien te han asignado, primero porque “Salud no responde” y segundo porque tu centro de salud correspondiente no coge las llamadas, con lo cual te ves totalmente abandonado a tu suerte y a tu salud e incluso ni conoces al doctor/ra que te han asignado y todo lo más son 5 minutos telefónicos. Ahora sucede con nuestra Selección que dentro de cuatro o cinco días inicia su andadura en la Eurocopa y dos han dado positivo y el resto, sin vacunar. Prueba de una falta total de previsión sobre un equipo que debiera haber sido vacunado con tiempo y no ahora deprisa y corriendo, una falta imperdonable de unos organismos oficiales del Deporte que sí han vacunado a nuestros atletas olímpicos y no a nuestra Selección nacional. Ahora resulta que es el Ejército el que tiene la misión de vacunar a nuestros futbolistas, pero no sabemos todavía si será de Tierra, Mar o Aire e incluso si tendremos que echar mano de la Sub-21a la vista de los contagios.