Europa Sur

Compás de espera entre el Algeciras y Salva Ballesta

● Club y entrenador alargan más de lo esperado una renovación que no termina de ver la luz ● La parcela deportiva pasa a primer plano

- Alessio González

En compás de espera. Así está la situación entre el Algeciras CF y Salva Ballesta para resolver una renovación que se está alargando más de lo esperado. Dos semanas después de que el club y el entrenador comenzasen a negociar con predisposi­ción de alcanzar un acuerdo, el algecirism­o sigue esperando noticias oficiales sobre quién será el encargado de comandar desde el banquillo el proyecto para el estreno en la Primera RFEF. A pesar de que las posturas se fueron acercando poco a poco, todavía no hay certeza de que el culebrón vaya a terminar con el final que casi todo el mundo da por hecho.

¿Se ha enquistado la negociació­n? ¿Corre riesgo de romperse? ¿Es una espera pactada? La realidad es que cuantos más días transcurre­n, más extraño parece todo. El Algeciras, que estaba volcado con la campaña de abonados que lanzó el pasado jueves, manda un mensaje de tranquilid­ad desde su seno y pide paciencia para que los nuevos dirigentes de la institució­n terminen de aterrizar y poner la casa en orden. Es comprensib­le como también lo es la creciente expectació­n entre la afición por la primera gran decisión bajo los mandos de Félix Sancho y Sergio Fernández.

La negociació­n entre Salva y el Algeciras arrancó con los habituales tira y afloja y, como explicó este periódico, con ambas partes dispuestas a afrontar una operación a fuego lento tal y como está resultando. El Algeciras, con Sergio Fernández a los mandos de la dirección deportiva, se marcó un plazo para zanjar el capítulo del entrenador, el pasado día 10 de junio, una fecha que ya ha expirado y ahora se dilata sin un nuevo tope en el horizonte. El lunes podría haber novedades ya que según ha podido saber este diario la oferta final e inamovible ya está sobre la mesa.

Toda la parcela deportiva del Algeciras 21-22 depende de la decisión con el entrenador. Sí y no. Es decir, la nueva gerencia confeccion­ará la plantilla ajustada al estilo del técnico que vaya a liderar el vestuario, pero el club tiene un plan trazado y una serie de renovacion­es y fichajes en mente que caerán en cascada una vez se haga oficial el nombre del preparador.

Otra duda también extendida entre el algecirism­o es si el club tiene un plan B. Si el Algeciras maneja otras opciones por si se tuerce la renovación de Salva Ballesta. Y lo tiene. Al menos eso deslizó Fernández cuando explicó que daban vía libre al técnico para que estudiase ofertas de superior calado en caso de recibirlas. Es decir, que los nuevos propietari­os no iban a cortar las alas a Ballesta en caso de propuesta irrechazab­le.

El hecho de que ya haya clubes de la categoría cerrando sus primeros fichajes y de que la mayoría de los banquillos estén confirmado­s tampoco preocupa a un Algeciras que sabe que el verano va a ser largo. Sancho y Fernández no quieren precipitar­se, mucho menos en sus primeros pasos en el Nuevo Mirador, donde tienen toda una estructura por levantar. Con la campaña de abonos ya en marcha, el Algeciras puede centrarse en pegar un acelerón en la parcela deportiva.

 ?? ERASMO FENOY ?? Salva Ballesta, en un gesto de protesta durante un partido.
ERASMO FENOY Salva Ballesta, en un gesto de protesta durante un partido.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain