El triunfo de Espadas abre la batalla por su sucesión en el Ayuntamiento de Sevilla
Juan Espadas no dejará la Alcaldía de Sevilla hasta que no presente oficialmente su candidatura para presidir la Junta. Ese momento llegará dos meses antes de la celebración de las autonómicas y, mientras tanto, seguirá al frente del gobierno municipal. ¿Y cuánto tiempo es eso? Si no hay adelanto, queda un año y medio por delante, pero, si ello se precipita, el momento para dar el paso podría llegar incluso a primeros del próximo septiembre.
Lo que está claro es que su victoria en las primarias abre también un nuevo tiempo en el Ayuntamiento de Sevilla, donde antes o después Espadas tendrá un sustituto para concluir el mandato. El movimiento se acelerará en las próximas semanas y abrirá una nueva batalla que, de momento, no ha trascendido, pues se dirime con discreción y la consigna de unidad que ha presidido la campaña a las primarias de Espadas.
Quedan exactamente dos años para que el mandato se agote y, por tanto, el relevo deberá salir del propio equipo de gobierno. Será un alcalde accidental y esa condición estrecha bastante el cerco. Un candidato externo tendría que llegar al final del mandato y las elecciones municipales están previstas para mayo de 2023.
Con perfil y garantías para sustituir al alcalde se habían situado en los últimos meses tres personas: los concejales que soportan los pilares del gobierno, Antonio Muñoz y Juan Carlos Cabrera; y la primera teniente de alcalde, la número dos a todos los efectos, Sonia Gaya, que habría quedado descartada al situarse al lado de Susana Díaz. A los otros dos ediles se les achaca que se sitúan en los dos extremos de la Sevilla dual.
No obstante, en el entorno del alcalde se insiste en que todavía no ha llegado el momento de abrir este melón.