Agradecimiento a la planta 5ª del Hospital de La Línea

El próximo domingo día 20 a las 10.30 horas de la mañana celebraremos una misa de difuntos en memoria de mi esposa, María del Carmen Rodríguez Esquivel. Ha pasado un mes de su fallecimiento y, como dice el dicho de que el bien agradecido es bien nacido, quería, a través de las páginas de Europa Sur, agradecer a todos los profesionales de la planta 5ª del Hospital de La Línea de la Concepción. Gracias a médicos, cirujanos, enfermeros-as, celadores-as y también al servicio de limpieza, a todos a los que tantas noches y días hemos llamado desde la habitación y han acudido raudos siempre con una sonrisa y con palabras de aliento tanto para la enferma como para nosotros, sus familiares. Nunca hubo una mala cara. Me gustaría decir el nombre de cada uno de ustedes, por ser verdaderos profesionales y por, dentro de la gravedad de la enfermedad, no preocuparnos más de lo que ya lo estábamos. Aunque no se ha podido evitar la muerte de la mujer de mi vida (65 años juntos) sé el esfuerzo que han hecho tantos los médicos como las enfermeras, con esas curas tan dolorosas, desde el primer día que llegamos a Urgencias y con tantas patologías tan diferentes y tan difíciles de curar. Gracias también por tantas palabras de aliento tantos a mis hijos como a mí en unos días tan difíciles, porque creo yo que nadie está preparado para ver cómo un ser tan querido se te va sin poder hacer nada. Me hubiera gustado subir a la quinta planta del hospital y poder saludaros, pero sé el esfuerzo que hacéis todas las mañanas. Por eso desde estas líneas del periódico Europa Sur os lo agradezco. Un cordial y respetuoso saludo para el Hospital de La Línea de la Concepción. También agradezco a tantos amigos que nos están dando el pésame tanto por teléfono como personalmente y un abrazo al Museo Taurino Pepe Cabrera por tener la distinción de guardar un minuto de silencio en su memoria durante la celebración del pregón taurino. Gracias de todo corazón. Familia Campos (Correo)