López del Hierro dice que si sugirió encargos a Villarejo fue “por cortesía”
● El marido de Cospedal declara al juez que no podía contratar a nadie en nombre del partido
Ignacio López del Hierro, marido de la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal, negó ayer ante el juez del caso Kitchen haber contratado al ex comisario José Villarejo, pese a haberle dicho “por cortesía” en algún momento, según consta en una grabación, que le iban a encargar “trabajos puntuales”.
El empresario declaró ayer en la Audiencia Nacional como imputado en la investigación sobre la presunta operación para sustraer en 2013 al ex tesorero del PP Luis Bárcenas documentación comprometedora para el partido, después de que el martes lo hiciera su mujer, quien también negó haber contratado a Villarejo.
Cospedal dijo que se reunió unas cuatro veces con él en la sede del PP ante la campaña mediática contra ella y su marido, al que se vinculó con unos apuntes de los papeles de Bárcenas, y dadas las buenas relaciones del ex comisario con la prensa, pero que se dio cuenta de que éste le contaba lo que ya se había publicado adornado profusamente.
Sin embargo, José Luis Ortiz, durante años jefe de gabinete de Cospedal y que también declaró ayer, elevó a ocho o diez las reuniones que cree que ésta mantuvo con Villarejo y aseguró que él únicamente cumplía órdenes de su jefa.
Al igual que Cospedal quiso desvincular al PP de toda responsabilidad en Kitchen, su marido, al negar haber hecho encargos a Villarejo, destacó que él no tenía capacidad para contratar a nadie en nombre del partido, del que dejó claro que no era militante, según informaron a Efe fuentes jurídicas.
Esto lo expuso al preguntarle por una grabación en el despacho de su mujer en la que se le oye decir a Villarejo que le le iban a encargar “trabajos puntuales”.
Dada la existencia de estas grabaciones, tanto él como la exdirigente del PP se han visto obligados a reconocer esas reuniones con el ex comisario, quien, según han manifestado López del Hierro y Ortiz, entraba a la sede del PP por el garaje, algo que ambos han enmarcado dentro de lo común en esa época.
Era Ortiz, según éste mismo declaró, quien le iba a recoger en coche oficial y lo conducía hasta la sede, ubicada en la calle Génova de Madrid. Aunque señaló que solía ser Villarejo quien pedía esos encuentros, admitió que en alguna ocasión también pudo ser la ex ministra quien le solicitó que contactase con él. En este contexto, supuso que la anotación del 18 julio de 2013 donde se lee, “Llámame urge un poco”, podría deberse a que la exdirigente del PP le pidió que le citase rápido.
Pero Ortiz, que manifestó su preocupación por su futuro laboral a raíz de su imputación, negó saber de qué trataban esas reuniones, en las que nunca participó.
El jefe de gabinete de Cospedal eleva a ocho o diez las reuniones de ella con el ex comisario