Calviño acumula más poder para relanzar la economía
● La nueva vicepresidenta primera da prioridad a lograr la recuperación tras la crisis de la pandemia ● La digitalización y la agenda verde, claves
La ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, sale muy fortalecidad de la crisis pergeñada por Pedro Sánchez y ocupará ahora la Vicepresidencia primera del Gobierno en sustitución de Carmen Calvo, lo que evidencia la prioridad de la recuperación económica en la nueva etapa. Calviño, que ya ascendió de la Vicepresidencia tercera a la segunda tras la salida
Montero asume Función Pública, pero deja de ser la portavoz del Ejecutivo
de Pablo Iglesias, está considerada la garante de la ortodoxia económica dentro del Ejecutivo de coalición, en el que coexisten distintas posturas sobre asuntos claves como el salario mínimo profesional o la reforma laboral.
La decisión de Sánchez de situarla como su primer lugarteniente reafirma su autoridad en la agenda económica del Gobierno, según algunos economistas consultados, que consideran que Calviño “sale reforzada” en la gestión de los fondos europeos y liderando las reformas comprometidas. Fuentes próximas al Gobierno también interpretan la decisión como el paso a una etapa en la que lo prioritario pasa a ser la recuperación económica, tras otra en la que lo ha sido la gestión de la pandemia o cuestiones políticas como los indultos. También estiman que supone un refuerzo del papel de Calviño en el equipo económico del Gobierno.
La nueva número dos del Ejecutivo se caracteriza por su perfil técnico y su credibilidad en Europa, donde entre 2014 y 2018, justo antes de incorporarse al Gobierno, fue directora general de Presupuesto Comunitario de la Comisión Europea. Su promoción la sorprendió en Venecia, participando en la reunión de ministros de Finanzas y gobernadores de los bancos centrales del G20, grupo del que España es país invitado permanente.
El departamento de Calviño ha coordinado muchas de las medidas para frenar el impacto económico del Covid-19, como los avales del Estado a los préstamos a empresas o el plan de ayudas directas al sector empresarial de 11.000 millones de euros, pero también el diseño del plan de recuperación español, cuya ejecución será ahora su gran reto.
Óscar López, número tres con Rubalcaba, sustituye a Redondo como jefe de gabinete
El plan de recuperación, que recibió en junio pasado la luz verde de la UE, busca la transformación profunda de la economía española, para lo que se han identificado dos palancas clave, la digitalización y la transición verde. El plan, el segundo en recibir el visto bueno de Bruselas, detalla inversiones y reformas a las que destinará los 69.500 millones asignados por la UE hasta 2026, de los que 19.000 millones llegarán este año.
Asimismo, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pasará a asumirá también las competencias de Función Pública, aunque queda liberada de ejercer la Portavocía del Gobierno, que queda en manos de Isabel Rodríguez. De este modo, se vuelve al esquema que había con el anterior Gobierno del popular Mariano Rajoy, en el que el titular del departamento, Cristóbal Montoro, tenía integradas las competencias de Función Pública.
Montero hereda de Miquel Iceta el reciente acuerdo con los principales sindicatos de la función pública para reducir la temporalidad en las administraciones públicas. De hecho, gracias al acuerdo cerrado el lunes, más de 300.000 plazas estructurales ocupadas por interinos se convertirán en fijas antes del 31 de diciembre de 2024.
El hasta ahora presidente y consejero delegado de Paradores Nacionales, Óscar López, será el nuevo jefe de gabinete de Sánchez en sustitución de Iván Redondo. Ocupó cargos orgánicos con José Luis Rodríguez Zapatero, como secretario general, y después con Alfredo Pérez Rubalcaba, que lo nombró secretario de Organización del PSOE.