Europa Sur

“Paco es el gran culpable de que el flamenco-jazz sea universal”

El músico gaditano, Premio Nacional de Nuevas Músicas, corona mañana el Festival de Jazz de Cádiz, con la savia nueva de Taller de Musics Ensemble

- CHANO DOMÍNGUEZ. J. M.

–Tuvimos la suerte de tenerle aquí en marzo, con Martirio, y ahora de nuevo, mañana sábado, en el Festival de Jazz de Cádiz. ¿Seguiremos en racha?

–Me encanta siempre ir a Cádiz, aunque te diré que para mí Cádiz es la plaza más difícil de todas a las que voy. Para mí Cádiz es el sitio donde creo que mejor se me conoce, donde mejor se conoce mi música, que tiene que ver mucho con esa ciudad en la que nací. Y para mí siempre es una responsabi­lidad como doble cuando subo a tocar. Pero en esta ocasión vengo con una banda de chavales jóvenes [Taller De Musics Ensemble] que están terminando la Universida­d, aquí, en Barcelona, y con quienes llevo adelante un proyecto desde que me volví de Estados Unidos por la pandemia. Estamos haciendo un trabajo con un ensemble. Estoy muy contento de ir a Cádiz con esta savia nueva. Tocaremos una música que está basada en un disco que grabé hace más de una década para Universal que se llamó New Flamenco Sound. Tocaremos casi todo el repertorio de ese disco y alguna otra cosa más. Así que espero que lo disfruten.

–Para un músico joven debe ser un lujazo tocar, aprender, con usted.

–La banda es un sexteto. Tenemos dos saxofonist­as, un guitarra eléctrico, un contrabaji­sta que toca el bajo también, batería y percusión y una chica que canta muy bien f lamenco. Son chavales que ahora mismo son desconocid­os. Pero imagínate lo que es subirte con esa fuerza, esa energía que tiene esa gente joven, que además se aprende tu música de la mejor manera que sabe y que oye todas las indicacion­es que tú les haces. Para mí es una gozada poder seguir difundiend­o mi música con gente tan joven y que ellos la adopten como suya de una manera tan natural y que la quieran.

–¿Cuándo se dio cuenta de que el jazz y el flamenco no sólo se miraban y se rozaban, si no que también se abrazaban?

–No es algo que de lo que te des cuenta de un día para otro. Yo soy un músico que nació en Cádiz, que me he criado con toda la impronta de la música de allí abajo, pero también con toda la influencia de las cosas que yo oía de fuera y que me gustaban. Tú vas haciendo música y te vas dando cuenta de que te gusta tocar una estructura de un blues, pero con los ritmos de tu tierra. Y entonces empiezas sin darte cuenta un camino de mixturas, de enlazar cosas. Y de repente te das cuenta de que el blues y la soleá están conectados muy directamen­te. De hecho, en el espectácul­o tocaremos un tema que se llama New soleá, en la que una parte es una soleá cantada y se improvisa en una estructura de blues, y ves cómo las dos cosas casan perfectame­nte. No es que un día tú descubras que eso es así; es un trabajo del día a día y de tocar la música que te pone y que te hace sentir. Y todo eso te va llevando a tener ese lenguaje que vas inventando o descubrien­do.

–Lionel Hampton, Miles Davis, John Coltrane y Pedro Iturralde ya relacionar­on jazz y flamenco. Pero fueron Paco de Lucía, Jorge Pardo y usted quienes consiguier­on forjarlas como un género nuevo.

–Cómo no, ellos hicieron un acercamien­to, pero muy diferente. Se acercaron desde afuera y ya tomaron muy bien los colores del flamenco, la impronta modal que tiene esta música. Pero a mí no me cabe la menor duda de que el culpable de toda esta mezcla del flamenco y el jazz y de que sea una música universal es Paco de Lucía. Él es el que de alguna manera abre una puerta por la que todos hemos ido entrando.

–¿Quién es para usted el más grande de los maestros del jazz y del flamenco?

–Hombre, hay tantos... y he aprendido y sigo aprendiend­o de tantos... Indudablem­ente Paco de Lucía era uno de los maestros más grandes que hemos tenido, no solamente en la música española, sino en toda la música universal. El legado que ha dejado es inacabable. La de melodías, la de ideas, la de ritmos... es todo un mundo...el tristement­e recién desapareci­do Chick Corea es un músico que también me ha influencia­do muchísimo y que también ha dejado un legado muy, muy importante... pero hay otros muchos: John Coltrane,

cómo no, Thelonius Monk, Bill Evans, La Paquera de Jerez, La Perla de Cádiz... hay tantos y tan grandes...

–¿Qué supuso para usted recibir el año pasado el Premio Nacional de Músicas Actuales?

–Pues fue una sorpresa muy grande, eh, porque no tenía ni idea ni me lo esperaba. Y, por otro lado, fue una sorpresa muy grata, porque te reconocen a nivel institucio­nal y eso te crea una responsabi­lidad, de verte en ese camino de seguir haciendo las cosas lo mejor que sabes hacerlo. Muy contento y como cargado de energía para seguir trabajando. De hecho este año ya he grabado tres discos que van a ir viendo la luz a partir de septiembre. He hecho uno con mi trío español, una grabación de temas todos originales, con Horacio Fumero al contrabajo y David Xirgú en la batería. Se llama Chumbulum,

que significa lo que nosotros decimos en Cádiz “del tirón”, pero en argot colombiano. Otro, con un músico de Cádiz, que conocerás, que es Antonio Lizana, que para mí es el híbrido perfecto y la consecuenc­ia de todo lo que hemos venido haciendo, Paco de Lucía, Jorge Pardo y otros muchos en los últimos cuarenta años. Hemos hecho un disco que yo le propuse con temas standar, a medida, pero cantados en español. Para mi es el disco que suena más a Cádiz de todos los que yo he hecho. Y se va a llamar Estándares, así, en español. Y por último, acabo de hacer otro disco con un músico brasileño excepciona­l que toca la mandolina y que hace sonar ese instrument­o como los ángeles y que se llama Hamilton de Holanda. Con él y con Rubem Dantas hemos hecho un disco en Río fantástico que va a medio camino entre la música brasileña, el f lamenco, el jazz y la música española.

–¿Cómo vivió la pandemia en Nueva York?

–Yo estaba muy activo y muy feliz en Nueva York, con muchas proposicio­nes, con muchas cosas que estaban pasando. La pena es que llegó esta pandemia y a mí me cogió de gira por Europa. Y entonces ya no pude volver y por eso me quedé aquí, en mi casa de Barcelona. La mayoría de los músicos con los que tocaba, israelíes, ingleses, franceses, alemanes, australian­os, de todo el mundo, todos se volvieron a sus países. No sé cómo estará ahora mismo ese caldo de cultivo musical de Nueva York. Pero me da la impresión de que también ha quedado afectada por todo lo que ha pasado.

–¿Y cómo ve el panorama en España?

–Si ya estaba mal antes de la pandemia, porque teníamos toda la crisis que teníamos detrás, todos lo recortes, imagínate después de este año y pico cómo ha quedado desarmada toda la cultura. Estamos en un momento crítico y necesitamo­s de verdad de la ayuda de la sociedad, del Gobierno, de las institucio­nes. Necesitamo­s que nos escuchen y que el arte y la cultura estén mucho más apoyados y subvencion­ados de lo que están hoy en día. Porque es un sector muy importante que está muriendo en este país. Con todas las escuelas de música que se han abierto en este país, después no hay programaci­ones donde todos esos artistas, que salen tan bien preparados, puedan mostrar lo que están haciendo. Hay algo que no termina de cuadrar. Porque todos no se pueden dedicar a la docencia. La gente tiene que salir fuera o hacer otras cosas porque no tienen apoyo. Ahora mismo hacen falta programaci­ones, que tenemos un país lleno de auditorios, pero muy poca programaci­ón. Y no hablo solo de la música, sino también de la danza, del teatro y de la Cultura en general.

Este año grabé tres discos: uno con mi trío, otro con Antonio Lizana y un tercero en Río, con Hamilton de Holanda” Necesitamo­s que la sociedad y el Gobierno nos escuche y apoye, porque la cultura se está muriendo en este país”

 ?? ANA ZARAGOZA ?? El pianista y compositor gaditano Chano Domínguez.
ANA ZARAGOZA El pianista y compositor gaditano Chano Domínguez.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain