Europa aboga por imponer el certificado Covid en interiores
● Francia aprueba el proyecto de ley para la utilización obligatoria de este documento en algunos actos sociales ● El último en adoptarlo ha sido Italia, donde será necesario desde el 6 de agosto
Cada vez más países en Europa están optando por imponer el certificado Covid para muchos actos corrientes de la vida social, incluso a la hora de tomar algo en un bar o un restaurante o utilizar un medio de transporte de largo recorrido.
La Asamblea francesa aprobó la madrugada de ayer en primera lectura el proyecto de ley para la utilización obligatoria de este certificado en algunos actos sociales y que obliga a vacunarse al personal sanitario y a todos los profesionales que tratan cotidianamente con personas vulnerables.
La tramitación ahora pasa al Senado y el Ejecutivo de Emmanuel Macron pretende que la aprobación definitiva se dé durante el fin de semana para que su aplicación general tenga lugar desde comienzos de agosto, en plena temporada vacacional.
El Ejecutivo ya había impuesto el certificado sanitario desde el pasado miércoles en los cines, teatros y todos los espectáculos culturales y deportivos que reúnan a más de 50 personas.
En agosto, si se cumplen los planes del Gobierno, se requerirá también para el transporte público de largo recorrido (autobuses, trenes, aviones y barcos), para tomar algo en un bar o un restaurante, pero también para hacer una visita a un hospital o una residencia de mayores.
Italia ha sido el último país europeo en decantarse por el pasaporte Covid: a partir del 6 agosto será obligatorio mostrar el certificado sanitario antes de sentarse a la mesa en un bar o un restaurante, pero también si se va a un cine, un teatro, un estadio o un concierto. No será necesario para consumir en la barra ni en las terrazas.
El primer ministro, Mario Draghi, señaló que así “los italianos podrán seguir divirtiéndose con la garantía de encontrarse entre personas que no son contagiosas” y defendió el decreto como “una medida que da serenidad”.
Desde el pasado día 16, en Grecia sólo pueden acceder a los locales de hostelería y ocio las personas que demuestren mediante su pasaporte Covid que han sido vacunadas o han pasado el coronavirus en los últimos seis meses. Aquellas que sólo presenten una prueba negativa no podrán entrar.
Para atajar la expansión del virus, el Gobierno griego ha hecho obligatoria la vacuna para los trabajadores de residencias de mayores y el personal sanitario, los primeros a partir de mediados de agosto y los segundos en septiembre, y no se excluye que se extienda esta medida para los docentes.
El Gobierno británico planea introducir en Inglaterra la obligación de mostrar el certificado de vacunación en discotecas a partir de finales de septiembre, cuando se prevé que toda la población de más de 18 años habrá tenido la oportunidad de vacunarse.
De momento, sólo “recomienda” a las empresas o comercios que acogen multitudes pedir ese “pasaporte” sanitario (carta o registro digital de la Sanidad pública), pero advierte de que podría legislar en el futuro para imponerlo en grandes eventos al aire libre, como festivales, conciertos, funciones de teatro o acontecimientos deportivos.
El Gobierno irlandés ha redactado una ley para permitir que bares y restaurantes sirvan a partir del lunes en interiores a personas que presenten el certificado digital Covid.
En Portugal, las zonas más castigadas mantienen el toque de queda entre las 23:00 y las 05:00. Bares y restaurantes deben cerrar a las 22:30 y para acceder al interior es obligatorio presentar un certificado digital o un test negativo, aunque es posible consumir en las terrazas sin prueba alguna.
También los espectáculos culturales terminan a las 22.30; los eventos sociales como bodas y bautizos pueden celebrarse con la mitad del aforo y se permiten los deportes al aire libre.
Tras registrar una subida del 35% de los casos de Covid-19 en una semana, sobre todo en la costa adriática, Croacia decidió ayer limitar en las regiones turísticas las reuniones a 15 personas en espacios privados, hasta 50 en espacios público, y hasta 1.000 si los asistentes presentan un certificado Covid.
En Bélgica, el certificado de vacunación será válido a partir del 13 de agosto para poder acceder a eventos de 1.500 personas o más que se lleven a cabo en el exterior y a partir del 1 de septiembre para eventos en espacios cerrados.
Grecia obliga a vacunarse a los trabajadores de determinados sectores