Tercera plata
Ray Zapata roza el oro ● en gimnasia artística
Los deportistas españoles sumaron dos nuevas medallas que aunque no fueron de oro lo parecieron: la plata lograda por el gimnasta Ray Zapata con la misma puntuación que el vencedor, y el bronce en triple salto de Ana Peleteiro tras batir dos veces su récord de España.
El gimnasta lanzaroteño ganó en un domingo dorado para el deporte español en Tokio el segundo puesto en la final de suelo, en la que obtuvo 14,933 puntos, los mismos que el israelí Artem Dolgopyat, pero este quedó por delante por presentar un ejercicio con mayor grado de dificultad.
Se trataba de la sexta medalla que logra la delegación española que compite en Tokio, tras un oro en tiro, dos platas en taekwondo y piragüismo y dos bronces en bicicleta de montaña y tenis, al que se iba a sumar un tercer puesto más al final de la jornada.
Peleteiro se hizo con el bronce en una final de triple salto en la que se impuso de nuevo su compañera de entrenamiento, la venezolana Yulimar Rojas, quien fijó un nuevo récord del mundo, 15,67 metros, en su último intento en el Estadio Olímpico de Tokio.
La atleta gallega logró por su parte batir por dos veces su propio récord nacional, primero con 14,77 en el segundo turno y luego con 14,87 en el quinto, y terminó celebrando el bronce junto a Rojas, la gran estrella de la jornada y su compañera de entrenamientos.
Y eso que el atletismo no había comenzado bien para España, con una sesión matinal en la que los cuatro participantes cayeron eliminados, aunque finalmente Carolina Robles fue recalificada para la final de 3.000 m obstáculos por haberse visto gravemente perjudicada por la caída de una rival.
Pero la tarde Tokio mejoró el panorama, cuando el gallego Adrián Ben logró un nuevo hito histórico al convertirse en el primer corredor español que se mete en una final olímpica de 800 metros, con un tiempo de 1.44,30 que le dio el cuarto puesto en la segunda serie y una de las dos plazas de repesca.
SUERTE DISPAR EN LOS DEPORTES DE EQUIPO
La selección española femenina de baloncesto se impuso a
Canadá, en una buena madrugada para el equipo de Lucas Mondelo, por 66-76 en su último partido de la fase de grupos y pasará como primera del Grupo a los cuartos de final, cuyos emparejamientos se decidirán por sorteo.
La masculina, en cambio, perdió por 87-95 contra Eslovenia en último partido de su grupo, por lo que acaba segunda y se verá con Estados Unidos en cuartos de final.
El equipo masculino de balonmano logró reponerse de su derrota ante Francia y selló su pase a cuartos tras imponerse este domingo por un claro 3627 a Argentina.
En hockey, España se despidió de los Juegos de Tokio con una derrota en cuartos de final ante Bélgica (1-3), en un parti
do en el que los RedSticks obligaron a remontar a los actuales campeones del mundo y plata en Río 2016.
En vela, El Nacra 17 de Tara Pacheco y Florian Trittel, y el Finn de Joan Cardona se clasificaron en la quinta posición de la general y en la tercera, respectivamente, para la Medal Race
(regata por las medallas), que se disputará el próximo martes. El mahonés tiene opciones de lograr el oro, mientras que los primeros sólo pueden optar al bronce mañana durante la prueba por las medallas.
DRESSEL RECLAMA EL TRONO DE PHELPS
El nadador estadounidense Caeleb Dressel, uno de los deportistas que más expectación habían generado para estos
Juegos, cerró su participación en Tokio logrando su quinta medalla de oro, una menos de las que aspiraba a ganar, así como otro récord para su palmarés, pero que le permite en cualquier caso reclamar el trono de la natación mundial, vacante desde la retirada del legendario Michael Phelps.
La australiana Emma McKeon se consagró por su parte como
la Reina de la velocidad femenina, tras sumar a los oros que logró en las pruebas de 100 libre y 4x100 el de ayer en la final de los 50 libre.
La mayor sorpresa del día llegó en la final de 100 metros masculinos, que conquistó el velocista italiano, Lamont Jacobs, con una marca de 9.80 que le convierte en sucesor del legendario Usain Bolt.
Pau Gasol Jugador de baloncesto
No hay tiempo para lamentarse, ¡ahora a preparar bien el partido e ir a por todas!