La CNMV aprueba la opa parcial de IFM sobre Naturgy
El fondo australiano ofrece 22,07 euros por acción condicionado a conseguir un 17% del capital de la energética española
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el supervisor bursátil español, autorizó ayer la opa parcial que lanzó sobre el 22,7% de la energética Naturgy el fondo australiano IFM, que ha garantizado que cumplirá con todas las condiciones impuestas por el Gobierno.
La aprobación por parte del supervisor bursátil español se produce unas semanas después de que el Gobierno español autorizara, con condiciones, esta operación. El Ejecutivo instó a IFM, por ejemplo, a apoyar durante cinco años las inversiones de la compañía vinculadas a la transición energética o a mantener la sede en España y a la mayoría de la plantilla.
El fondo IFM detalla en el folleto de la opa, divulgado ayer, que cumplirá con todos esos requisitos, tal como recuerda el comunicado de la propia CNMV.
El plazo de aceptación será de 30 días naturales a partir del día hábil bursátil siguiente a la publicación del primer anuncio con los datos esenciales de la oferta, finalizando también en día hábil bursátil. Así pues, ahora IFM dispone de cinco días para publicar ese anuncio, y al día siguiente de que lo haga se pondrá en marcha el contador para el plazo de aceptación, que será de esos 30 días, según decidió IFM.
En el folleto, IFM recuerda que ofrece 22,07 euros en efectivo por cada acción de Naturgy –en un principio ofreció 23 euros, pero el fondo ya dijo que descontaría del precio los dividendos abonados por Naturgy– e insiste en que la opa está “condicionada” a alcanzar, al menos, un 17% del accionariado, lo que le permitiría nombrar a dos consejeros.
Para avalar su oferta, IFM ha depositado los avales necesarios para sufragarla y aclara que los gastos de corretaje y otros derivados de la aceptación de la opa irán a su cargo.
“Naturgy es una atractiva oportunidad de inversión”, argumenta IFM en el folleto, en el que también destaca su “sólido equipo de dirección”.
IFM insiste en que no se propone adquirir “una participación de control” en Naturgy como consecuencia de la opa y subraya que sus intenciones “están alineadas con las condiciones establecidas” por el Consejo de Ministros, las cuales “ha decidido aceptar”.
En esta línea, defiende “un plan industrial a largo plazo que apoye la creación de valor de Naturgy, basado en inversiones sostenibles y razonablemente rentables vinculadas a la transición energética” y una política de dividendos “prudente”, en línea con el nuevo plan estratégico de la multinacional “o incluso potencialmente un dividendo menor si ello fuese necesario” para cumplir con las condiciones del Gobierno”, asegura.