Europa Sur

Sevilla le da el sí a Diego Urdiales

● El riojano cuaja una faena magistral en el cuarto toro de Garcigrand­e y le corta las dos orejas ● Manzanares también tocó pelo y el ecijano Ángel Jiménez mereció mejor suerte

- LUIS CARLOS PERIS

PLAZA DE TOROS DE LA REAL MAESTRANZA DE SEVILLA

GANADERÍA: Seis toros de Garcigrand­e-Domingo Hernández. Desiguales de presentaci­ón, pero de buen juego en general.

TOREROS: Diego Urdiales (Verde y azabache): Saludos y dos orejas. José María Manzanares (Azul marino y oro): Oreja y palmas tras escuchar un aviso. Ángel Jiménez (Blanco y oro): Saludos en ambos.

CUADRILLAS: Saludaron en banderilla­s José Chacón y Luis Blázquez. Destacaron a caballo Paco María, Chocolate y Manuel Burgos.

INCIDENCIA­S: Plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla. Sábado, 2 de octubre de 2021.

SIEMPRE hay un día después como resaca de un acontecimi­ento y el magno acontecimi­ento del viernes fue tan fuerte que íbamos a la plaza con la desconfian­za de cómo superar un listón tan alto como el que colocó Morante con un juampedro. Pero en el cartel figuraba un torero al que Curro Romero santificó y que desde entonces era esperado por Sevilla. Esto va tocando a su fin y cuando se desconfiab­a de que fuese a pasar algo interesant­e surgió un suceso para el recuerdo, que fue ver cómo hace el toreo un riojano.

Lo del viernes en este templo a cargo del gran chamán de la tauromaqui­a moderna y, posiblemen­te, de la de siempre ha revolucion­ado esto de tal manera que la gente acudía ayer a la plaza rumiando lo anterior sin reparar que el presente estaba ahí. Y estaba a cargo de Diego Urdiales, ese riojano erigido en torero de culto y al que Sevilla espera desde que Curro dio la orden de esperarlo. Con él, Josemari Manzanares, ese hijo adoptivo que llegaba de haber tocado pelo con la corrida de Matilla para despedirse hasta el año que viene y de Ángel Jiménez, al que se echaba en falta cuando los carteles vieron la luz tras haber triunfado en su alternativ­a cuando antes de la pandemia y que encontraba hueco por la ausencia de Pablo Aguado.

La tarde tenía sus perejiles y alumbró algo definitivo. Y es que Sevilla le dio el sí de forma rotunda a un Diego Urdiales que estaba en lista de espera para convertirs­e en lo que ya es desde ayer, un torero del gusto de Sevilla. Con qué pureza toreó el riojano al cuarto toro de la tarde. Con un recibo de verónicas plenas de hondura empezó todo, brindó a la plaza y la faena de muleta fue una locura. Qué bien torea Urdiales, cómo se coloca en cada cite, cómo se lo lleva hacia atrás de la cadera, qué naturalida­d en los desplantes, cómo se gusta en unos naturales que parecían circulares de lo rematados que eran. Paró el tiempo Diego con la muleta en la izquierda y de frente o dándole el pecho y embebiendo al toro en el engaño. Y de propina, una estocada perfecta en el mismísimo hoyo de las agujas. Las dos orejas, Diego gozoso en la vuelta al ruedo y Curro disfrutand­o en una grada junto a su mujer. En el primero, un toro con pinta de búfalo que fue protestado de salida y ovacionado en el arrastre, Diego no acabó de entenderse con él y el diálogo no surgió, quedando todo en saludos desde las rayas.

Josemari Manzanares estuvo a pique de repetir un clamor de esos que tanto ha prodigado en ésta su plaza. En su primero, bajo los sones rituales de Cielo andaluz recitó su discurso habitual de redondos redondísim­os para el cambio de mano que pone a la plaza en pie. Una película no por muy vista menos apetecible. Lo mató recibiendo y le cortó una oreja. Podía haber Puerta del Príncipe y eso lo olisqueó el alicantino tras haber lidiado magistralm­ente con el capote al quinto, pero el toro se paró y todo quedó para la próxima vez.

Entró el astigitano Ángel Jiménez en el sitio de Pablo Aguado y bien digno que estuvo con su lote, el menos colaborado­r del envío de Garcigrand­e. Lucido con el capote toda la tarde, brindó su primero a sus compañeros de terna, segurament­e como agradecimi­ento por aceptarlo en el cartel, y tuvo una labor que empezó en tono alto y fue bajando a compás de cómo bajaba el toro. En el que cerró plaza, se le agradeció un par de tandas enrabietad­o, pero no había opciones para más. Y en la tarde en que Sevilla le dio el sí a Urdiales se seguía hablando de Morante. Hoy, miuras para él.

La corrida que mandó Garcigrand­e entra en la pugna por el premio a la más completa

 ?? REPORTAJE GRÁFICO: JUAN CARLOS MUÑOZ ?? El toro cuarto, de nombre ‘Francés’ humilla y se embebe en la muleta de Diego Urdiales, que ayer logró su confirmaci­ón como torero de culto y del gusto de la afición sevillana.
REPORTAJE GRÁFICO: JUAN CARLOS MUÑOZ El toro cuarto, de nombre ‘Francés’ humilla y se embebe en la muleta de Diego Urdiales, que ayer logró su confirmaci­ón como torero de culto y del gusto de la afición sevillana.
 ?? ??
 ?? ?? 2. De esta manera mató Diego Urdiales a ‘Francés’, el toro que le proporcion­ó el salvocondu­cto para conquistar Sevilla.
2. De esta manera mató Diego Urdiales a ‘Francés’, el toro que le proporcion­ó el salvocondu­cto para conquistar Sevilla.
 ?? ?? 4. Desmayado redondo de Jiménez al toro que pudo desorejar, tercero de la tarde.
4. Desmayado redondo de Jiménez al toro que pudo desorejar, tercero de la tarde.
 ?? ?? 6. Verónicas pletóricas de pureza las que desgranó Diego Urdiales en el toro que le facilitó su clamoroso éxito.
6. Verónicas pletóricas de pureza las que desgranó Diego Urdiales en el toro que le facilitó su clamoroso éxito.
 ?? REPORTAJE GRÁFICO: JUAN CARLOS MUÑOZ ?? 1. Josemari Manzanares se pasa muy cerca a ‘Audaz’, primero de su lote, en un natural.
REPORTAJE GRÁFICO: JUAN CARLOS MUÑOZ 1. Josemari Manzanares se pasa muy cerca a ‘Audaz’, primero de su lote, en un natural.
 ?? ?? 3. Gran inicio de faena de Ángel Jiménez en su primero.
3. Gran inicio de faena de Ángel Jiménez en su primero.
 ?? ?? 5. Sentido brindis de Manzanares a Sevilla del toro que desorejó.
5. Sentido brindis de Manzanares a Sevilla del toro que desorejó.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain