Los fondos europeos y la recuperación traen el mayor gasto público de la historia
● De los 196.742 millones que Hacienda prevé consumir, 27.633 corresponden a financiación comunitaria para distintos sectores ● Los bonos para el alquiler y cultural, medidas estrella
Los Presupuestos de 2022 contarán con un gasto récord gracias a la inyección de los fondos europeos y la recuperación económica, que permitirán incrementar la dotación de prácticamente todas las políticas y hacer guiños a los jóvenes y a las rentas bajas.
El Consejo de Ministros aprobó ayer el proyecto del Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2022 –calificado como “de la recuperación justa” por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero–, que inicia ahora su andadura parlamentaria con el objetivo de entrar en vigor el próximo 1 de enero.
Las cuentas partían de un techo de gasto récord de 196.142 millones de euros, una cifra que engloba 27.633 millones de fondos de la UE, destinados principalmente a industria y energía (19,8%), investigación, desarrollo y digitalización (19,6%) e infraestructuras y ecosistemas resilientes (17,4%).
En concreto, los componentes con mayor dotación serán política industrial (3.184 millones), rehabilitación de vivienda (2.839), movilidad sostenible (2.185), impulso a la pyme (2.140) y modernización de las Administraciones Públicas (1.795).
Las políticas de juventud –dotadas con 12.550 millones, un 84,8% más– concentran buena parte de los grandes anuncios de estas cuentas, como el bono cultural de 400 euros para jóvenes de 18 años, que tendrá un coste de 210 millones.
El bono alquiler joven estará dotado con 200 millones y dará 250 euros a los españoles de entre 18 y 35 años con salarios inferiores a 23.725 euros brutos anuales.
Las becas contarán en este Presupuesto con 2.199 millones, una cifra histórica que beneficiará a 808.517 estudiantes y abarcará también a aspirantes a juez, fiscal o abogado del Estado. La formación profesional estará dotada con 2.075,9 millones.
Montero destacó que el gasto social alcanzará los 240.475 millones (248.391 millones si se añaden los fondos europeos), una cifra récord que supera en un 3,6% la de 2021 y que supone "seis de cada diez euros del presupuesto nacional". El gasto en políticas de vivienda crece un 33,9%; en servicios sociales, un 20,3%, y en pensiones, un 4,8%, mientras que baja el gasto en desempleo –un 10,2%, debido a la mejora de la situación laboral– y en compra de vacunas –un 51,9%–. También desciende, en un 4,7%, el gasto en intereses de la deuda.
La ministra destacó además que el Presupuesto está volcado en la inversión, que aumenta un 8,6%, mientras que las transferencias de capital lo hacen un 9,9% y la dotación para ciencia, un 7,7%.
Los recursos para el bono social térmico aumenta casi un 44%; para comercio, turismo y pymes, un 32,1%, y para investigación, desarrollo e investigación, un 7,7%.
El Presupuesto incluye una subida del 2% del sueldo de los empleados públicos y del 3% de las pensiones mínimas y no contributivas, así como del 2,5% del indicador público de renta de efectos múltiples (IPREM), que sirve para calcular ayudas y prestaciones.
La reforma de las pensiones, en trámite parlamentario, contempla que las pensiones suban de acuerdo a la media de la inflación de noviembre a noviembre, por lo que aún faltarían dos datos para precisar el incremento, aunque la evolución del IPC apunta a un alza de alrededor del 2,2% o 2,3%.