¿Punto de inflexión para el reinicio verde?
Comienza la cumbre del clima en Glasgow con el reto de impulsar la descarbonización
Dos años después de la COP25 del Clima de Madrid y con una pandemia por medio, el mundo busca avanzar en la adopción de medidas para afrontar la crisis climática y acelerar la descarbonización y la transición ecológica. Será en la Cumbre del Clima de la ONU, la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP26) que arrancó ayer en Glasgow.
La última cumbre fue un éxito de organización, pues se montó en apenas un mes, tras la espantada inicial de Brasil con la llegada del climaescéptico Jair Bolsonaro a la presidencia y la posterior renuncia de Chile debido a las fuertes tensiones sociales en el país. En cuanto a los resultados de Madrid, fueron mejor de lo esperado con el incremento, aunque tímido, de la ambición climática, y ello pese a que el principal emisor de gases de efecto invernadero per cápita, EEUU (en términos absolutos es China), había iniciado el proceso de abandono del Acuerdo de París, al que ha vuelto tras la derrota en las urnas del negacionista Donald Trump.
En el éxito de Madrid fue clave la labor de la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica Teresa Ribera. Los resultados habrían sido peores sin su conocimiento de la compleja liturgia de estas cumbres multilaterales y la determinación por lograrlos al prolongarse la cumbre 48 horas.
No obstante, en Madrid quedaron cosas pendientes, como el desarrollo del artículo 6 del Acuerdo de París para el establecimiento de un mercado global de carbono, cuestión que volverá a ser uno de los caballos de batalla en Glasgow. Si hace dos años ya era “Tiempo de Actuar”, lema de la COP de Madrid, ahora resulta urgente acelerar la toma de decisiones. Lo reclama la comunidad científica en los últimos informes del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU, que han vuelto a remarcar la gravedad del momento y la urgencia en la descarbonización de la economía ante el riesgo de consecuencias catastróficas.