El acusado por el crimen machista de San Roque confiesa su culpabilidad
● El Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Algeciras ordena su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza
El acusado de asesinar a su expareja, María Isabel M. M., el pasado fin de semana en la localidad de San Roque, reconoció los hechos ante la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Algeciras, donde compareció en el día de ayer. Tras su declaración, a petición de la Fiscalía el juez decretó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del detenido.
Al acusado se le imputa un presunto delito de asesinato, petición a la que se adhirió la acusación particular después de que prestara declaración ate la jueza. Fuentes judiciales recordaron que no constaban denuncias previas de la víctima contra el detenido.
La Guardia Civil lo detuvo cuando trataba de lanzarse al vacío desde una planta alta del hospital de Los Barrios, donde trabajaba como vigilante de seguridad.
El crimen tuvo lugar la madrugada del domingo en la vivienda de La Alcaidesa en la que residía la víctima, de 37 años, cuya muerte fue considerada un caso de violencia machista.
Según fuentes de la investigación, María Isabel fue abordada por su expareja cuando regresaba a su domicilio tras pasar todo el día fuera. Sus dos hijas menores, de 7 y 8 años, estaban con su padre, y su hijo mayor, un chico de 16, con el suyo en ese momento.
Tras el suceso, el ahora detenido llamó por teléfono a su hermano, que vive en Ceuta, para comunicarle que había acuchillado a su expareja, de la que se había separado hacía al menos dos meses, y que iba a suicidarse tirándose desde la sexta planta del hospital.
Fue la mujer del hermano del presunto autor del crimen quien alertó a la Guardia Civil, que desplazó sendas patrullas a la vivienda de la víctima, donde hallaron el cuerpo sin vida, y al citado hospital, donde lograron localizar y detener al presunto autor.
Aunque María Isabel M. M. no había denunciado al detenido, a éste sí le constaban dos denuncias anteriores por violencia machista. Había sido denunciado por dos de sus exparejas en 2014 y en 2017, denuncias que estaban inactivas tras prescribir.
María Isabel M. M. regentaba desde hacía unos diez años junto a su madre, Ana, la cafetería Plum Cake en la Alameda Alfonso XI de San Roque. Su presunto asesino incluso había trabajado anteriormente en el negocio, por lo que muchos clientes habituales del establecimiento los conocían a ambos.
Hasta ayer, las banderas de todos los edificios municipales de San Roque ondearon a media asta en señal de duelo por el trágico suceso.
Al acusado se le imputa un delito de asesinato, al que se adhiere la acusación particular