Ioniq 5: un SUV lleno de recursos
Cargas ultrarrapidas, cesión de energía con V2L, placas fotovoltaicas para producir electricidad...
EL Ioniq 5 ya está a la venta. Se trata de un SUV de 4,64 m de largo, 1,89 m de ancho y1,61 de alto con cuatro versiones en función de la configuración de motores y baterías.
La gama arranca con la batería de menor capacidad de las dos posibles, la de 58 kWh, combinada con un motor en el eje trasero de 170 CV y, siempre, con un único acabado, el Light. En este caso, el precio de tarifa es de 43.620 euros.
El escalón siguiente, por potencia, lo ocupa el motor de 218 CV, también situado en el eje posterior, y que sólo se asocia con la batería ya de mayor capacidad, la de 72,6 kWh. No obstante, este cóctel se liga con tres niveles de acabado: con el Light su precio de tarifa es de 46.320 euros; mientras que con el Start éste aumenta 5.500 euros. Si se recurre al nivel Energy el precio sería de 55.920 euros; esto es, 4.100 euros adicionales respecto al nivel intermedio de equipamiento.
Ya con dos motores y con la batería grande el Ioniq 5 se ofrece exclusivamente con el acabado Energy. Su potencia combinada (95 CV del eje delantero y 210 del trasero) es de 306 CV. Cuesta 59.020 euros. Habrá una de 235 CV, también AWD, con 58 kWh.
Una de las particularidades de la plataforma E-GMP a la que recurre el Ioniq 5, semejante a la empleada por el Kia EV6, está en la posibilidad de usar cargas para sus baterías muy potentes.
Puede conectarse a puntos de carga que proporcionan hasta 350 kW como los de la red Ionity, aunque en el caso de estos Ioniq 5 la potencia máxima es de 220 kW: en la práctica, esto supone que con 5 minutos de conexión a la infraestructura se recarga energía suficiente para hacer 100 km más. También admiten pueden conectarse a los cargadores más estandarizados, de 400 v.
La versatilidad de cara a admitir cargas del Ioniq es tal que el cargador de a bordo también permitir recibir, en este caso ya de corriente alterna no continua, potencias de hasta 11 kW en trifásico, por 7,2 kW en monofásico.
También hace diferente a estos modelos con la plataforma EGMP del resto la posibilidad de ceder energía, hasta 3,6 kW.
Otra aportación inusual del Ioniq 5 está en dotacion de un panel fotovoltaico en el techo. Con la energía producida podría recorrerse en un año 1.500 km.
Hemos conducido la versión más potente de propulsión y con la batería más capaz. En ella, la posición de conducción es adaptable a diferentes ocupantes por lo generoso de las regulaciones, aunque quizá pediríamos algún
La autonomía con una carga oscila entre los 384 con 58 kWh y los 481 km con 72,6 kWh
En nuestro recorrido, a ritmo muy vivo, el consumo medio fue de 20,1 kWh/100 km
centímetro extra en profundidad para el volante. Este agrupa muchas funciones en los radios e incluso cuenta con levas para poder elegir entre los diferentes modos de frenada regenerativa: de un nivel con nula retención a dos con distintos grados y la activación del modo auto que interviene frenando con el motor en función de los sensores que advierten de otros vehículos o el navegador.
La instrumentación aporta en su pantalla tres diseños distintos en función del modo de conducción elegido -se apoya con un HUD con realidad aumentada-, así como una zona central con un ordenador de viaje con información semejante a la de otros modelos del grupo industrial. Está unida por un mismo cristal con la pantalla central apaisada, también de 12”, del sistema de infoentretenimiento, donde es posible encontrar funciones específicas para los coches eléctricos como el control del uso de la energía con el V2L, programar cargas, etc. Por supuesto, también los controles de navegación, teléfono, equipo de sonido… todo siempre de serie.
Puede responder a la voz, aunque exige repeticiones o reformulaciones en algunos casos como el marcado de teléfono con números, y tiene teclas físicas para acceder a algunos atajos justo encima de los mandos táctiles del climatizador.
Entre los dos asientos delanteros hay una consola con diferentes hueco. Puede desplazarse longitudinalmente 14,5 cm.
Con unos Michelin Pilot Sport EV 255/45 R20 el Ioniq 5 muestra un magnifico agarre sobre el asfalto, lo que da mucha seguridad en curva una vez que el coche está apoyado en tanto que la dirección también parece precisa y tiene asistencia bien calibrada.
No obstante, en el momento previo a la entrada a la curva se siente que la amortiguación en extensión no es contundente en atajar el movimiento de la carrocería. Esta sensación de flotabilidad puede condicionar el ritmo de conducción yendo deprisa pero, en condiciones de conducción normal y rápida, es un coche muy cómodo, que se ocupa de que los baches no alteren el confort de los ocupantes y suficientemente bien aplomado con la misma eficacia con la que se viaja en silencio. Así, el Ioniq 5 exige tomarse las cosas, si no con calma, sí sin brusquedades.