La Policía desarticula en Málaga una banda que tráficaba con drogas y armas
Mijas era el centro de operaciones de una organización criminal que trabajaba en el Reino Unido
La Policía Nacional, en coordinación con la National Crime Agency de Reino Unido, han desarticulado en la provincia de Málaga una organización criminal, compuesta mayormente por súbditos británicos y polacos, dedicada al tráfico de drogas y armas.
Los investigadores hallaron 30 kilos de marihuana envasada al vacío fueron intervenidas en una villa de La Cala de Mijas –considerada como el centro de operaciones de la red–. En una nave industrial de Manilva, la Policía desmanteló un cultivo compuesto por 355 plantas de marihuana y detuvo a otras tres personas.
La operación se ha saldado con 17 detenidos por su presunta implicación en los delitos de tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, defraudación de f luido eléctrico y pertenencia a organización criminal. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Estepona ha decretado el ingreso en prisión preventiva de nueve de ellas.
La investigación se inició a partir del arresto del conductor de una furgoneta, un ciudadano británico, que intentó evadir un control policial en Estepona en abril del pasado año. Se le intervino una fuerte suma de dinero.
Activados los mecanismos de cooperación policial internacional, agentes de la Udyco Costa del Sol conocieron por parte de la National Crime Agency de Reino Unido que el dinero intervenido en Estepona al arrestado tenía su origen en las actividades ilícitas de una violenta organización criminal, que operaba principalmente en la ciudad británica de Warrington, formada en su mayor parte por ingleses, cuyas actividades principales eran el tráfico ilícito de armas, el tráfico de drogas y el blanqueo de los beneficios obtenidos gracias a las actividades delincuenciales. Las pesquisas practicadas situaban a una parte de la estructura de la trama británica en la costa malagueña.
La organización tenía como fin proveerse de drogas y armas para su exportación al Reino Unido, empleando camiones y vehículos caleteados para el transporte de la mercancía por carretera. Así, en febrero interceptaron en Marbella una furgoneta con 29 kilos de hachís. Se detuvo al conductor. La Policía descubrió que la banda recepcionaba la droga en una finca en Alhaurín el Grande. Así, los agentes detectaron un camión junto a dos coches lanzadera, en Vélez-Málaga e intervinieron 91 kilos de hachís dentro de los marcos de un conjunto de espejos.