Macron y Draghi firman el Tratado del Quirinal para impulsar el eje franco-italiano en Europa
Este acuerdo “histórico” se produce en un momento “delicado” para la UE como es la marcha de Merkel
El primer ministro italiano, Mario Draghi, y el presidente francés, Emmanuel Macron, firmaron ayer en Roma el Tratado del Quirinal, un acuerdo considerado por ambos “histórico” con el objetivo de impulsar el eje franco-italiano en Europa y comenzar una nueva era en las relaciones entre los dos países, una vez superadas las dificultades de los últimos años.
“Buscar la soberanía europea significa diseñar el futuro de la Europa que queremos, no de la que quieren otros”, dijo Draghi tras la firma en la rueda de prensa conjunta con Macron, quien resaltó que París y Roma comparten una visión de una Europa “más integrada, democrática y soberana” y que su relación se ha mantenido incluso “en los periodos más difíciles”, como durante la pandemia.
El pacto sellado por Draghi y Macron en un acto solemne pero también emotivo en el edificio símbolo del poder italiano, el Palacio
del Quirinal, y en presencia del jefe del Estado italiano, Sergio Matarella, supone un avance en la colaboración bilateral en política exterior, seguridad y defensa, justicia, política migratoria, cooperación económica e industrial, educación y cultura, entre otras.
Pero esta alianza tiene también otra finalidad: favorecer un frente común de París y Roma, dando mayor peso a ambos países, en un momento delicado para el equilibrio de poderes en la UE con la marcha de la canciller alemana, Angela Merkel, tras más de 15 años abanderando la política del Viejo Continente.
El Tratado del Quirinal “pretende reforzar la convergencia de las posiciones de París y Roma en Europa”, reconocieron a Efe fuentes del Gobierno italiano, que resaltaron que el acuerdo llega cuando “las relaciones bilaterales son excepcionales”.