El Rey defiende una justicia independiente en aras de la convivencia
● Felipe VI vuelve a presidir la entrega de despachos a los nuevos jueces en Cataluña tras el veto del Gobierno el año pasado
“La independencia y la imparcialidad” del poder judicial son la base para reforzar “la convivencia pacífica”, la concordia y la estabilidad ciudadana en una sociedad “plenamente democrática” como la española. Así lo proclamó ayer Felipe VI, que volvió a presidir el acto de entrega de despachos a los nuevos jueces en el Auditori de Barcelona, después de que el pasado año no asistiera por decisión del Gobierno para no alterar la convivencia en vísperas de la sentencia de inhabilitación del entonces presidente de la Generalitat, Quim Torra. El presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, agradeció al monarca su presencia en la ceremonia porque “simboliza la unidad y permanencia” del Estado y resalta la “dignidad” de la judicatura.
Sin hacer ninguna mención a la controversia que generó su ausencia, Felipe VI destacó la legitimidad “constitucional y moral” de la Justicia como “una institución esencial en la que los ciudadanos pueden confiar”. “Una sociedad moderna y avanzada como la nuestra, una sociedad plenamente democrática como es la sociedad española, sólo puede desarrollarse en paz y concordia si cuenta con un mecanismo independiente y neutral para la resolución de los conf lictos”, enfatizó el jefe del Estado. El rey recordó que “las instituciones en toda la sociedad son esenciales para hacer realidad la idea de Estado”, del que la judicatura es parte “nuclear”.
Además de Lesmes y la ministra de Justicia, Pilar Llop, el acto contó con la participación del presidente del Tribunal Constitucional, Pedro González-Trevijano, y la fiscal general del Estado, Dolores Delgado. Ni el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, ni ningún conseller asistieron al acto. Tampoco lo hizo la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, mientras que sí lo acudió el mayor de los Mossos d”Esquadra, Josep Lluís Trapero.
A los 188 componentes de la 70 edición de la carrera judicial, de los que 134 son mujeres, Felipe VI los emplazó a actuar desde “la independencia y la imparcialidad”. “La aplicación del caso concreto, desde el más estricto rigor técnico, pero también desde la valoración en conciencia de las específicas circunstancias de cada asunto, es lo que da sentido a vuestra entrega al servicio público de la Justicia”, sostuvo don Felipe.
Por su parte, Lesmes, cuyo mandato lleva caducado casi tres años ante la falta de acuerdo para renovar el CGPJ por parte de PSOE y PP, remarcó a los nuevos jueces “la necesidad de juzgar en ausencia de elementos extraños, no aceptables procesal ni jurídicamente, tendentes a influir, ilegítimamente, en el pronunciamiento judicial”.