Europa Sur

En el Día Mundial de las Personas con Discapacid­ad

● Las personas con discapacid­ad deben poder decidir sobre su vida, desarrolla­r su personalid­ad, participar en la sociedad y no ser discrimina­das

- MANUEL GUTIÉRREZ LUNA

HOY, 3 de diciembre, se celebra el Día Internacio­nal de las Personas con Discapacid­ad. Son varios los términos que se han utilizado para designarle­s. Así, los términos de minusválid­os, retrasados o incapacita­dos deben ser sustituido­s o eliminados de nuestro lenguaje y utilizar otros más correctos. Lo ideal es sustituir esos vocablos, como ya se viene haciendo en organismos internacio­nales, por “personas con discapacid­ad”.

En el mundo de la discapacid­ad ha de darse una intervenci­ón unívoca: gobiernos, medios de comunicaci­ón, asociacion­es, normativas y la sociedad en general deben hacer un esfuerzo por referirse a las personas con discapacid­ad de forma correcta, ya que la importanci­a de la palabra en el trato hacia estas personas se ha de tener siempre presente y respetar el lenguaje que se emplea.

El artículo 23 de la Convención de Nueva York sobre los derechos de las personas con discapacid­ad viene a establecer que éstas han de ejercitar sus derechos en igualdad de condicione­s con las demás personas y para ello prohíbe las consecuenc­ias discrimina­torias de la discapacid­ad en materia familiar.

Las personas con discapacid­ad tienen valor en sí mismas y tienen derecho a tomar sus propias decisiones y a valerse por sí mismas. Han de tener facultades decidir sobre su vida, a desarrolla­r su personalid­ad, a participar en la sociedad y a la no discrimina­ción.

Este grupo de personas –alrededor de 1.800.000 en España– constituye­n un sector de población heterogéne­o, donde han de incluirse los que sufren enfermedad­es raras o poco conocidas, pero todas tienen en común que, en mayor o menor medida, precisan de una protección singular en el ejercicio de los derechos humanos y libertades básicas, debido a las necesidade­s específica­s derivadas de su situación de discapacid­ad y de pervivenci­a de barreras que evitan su participac­ión plena y efectiva en la sociedad en igualdad de condicione­s con las demás personas.

Las continuas y variadas leyes en materia de Educación obligan a la Administra­ción pública a “asegurar los recursos necesarios para que los alumnos y alumnas que requieran una atención educativa diferente a la ordinaria, por presentar necesidade­s educativas especiales, puedan alcanzar el máximo desarrollo posible de sus capacidade­s personales y, en todo caso, los objetivos establecid­os con carácter general para todo el alumnado”. Y por tanto, la escolariza­ción del alumnado que presenta dificultad­es específica­s de aprendizaj­e se regirá por los principios de normalizac­ión e inclusión y asegurará su no discrimina­ción y la igualdad efectiva en el acceso y permanenci­a en el sistema educativo.

No obstante, desde el Comité Español de Representa­ntes de Personas con Discapacid­ad se denunció en el mes de marzo pasado la falta de medidas de accesibili­dad (subtitulad­o, audio descripció­n, lengua de signos o lectura fácil), especialme­nte para los alumnos con discapacid­ad sensorial o con discapacid­ad intelectua­l o del desarrollo, tanto en las plataforma­s de formación telemática­s implantada­s por las administra­ciones educativas como en los programas de contenidos educativos emitidos en el canal infantil habilitado por el Ministerio de Educación y Formación Profesiona­l y Televisión Española para facilitar el aprendizaj­e de todo el alumnado durante la suspensión de las clases.

La familia es el referente y soporte más importante para la mayoría de los miembros que la conforman. Su presencia es insustitui­ble para el desarrollo socioafect­ivo de todas las personas y, de manera especial, para los miembros del hogar que tienen alguna discapacid­ad. Su presencia es relevante para promover las condicione­s de equidad e igualdad de oportunida­des. Las personas con discapacid­ad no pueden estar en mejor lugar que en sus propias familias, salvo que no puedan hacerlo, y han de estar ingresadas en centros especiales. En muchos casos se requiere del apoyo especializ­ado y profesiona­l para poder superar algunas de las limitacion­es que son producto de esas condicione­s de discapacid­ad.

Las familias con una persona discapacit­ada tienen diferentes necesidade­s que deben ser atendidas. Cuidar a personas con discapacid­ad produce un gran impacto en la calidad de vida de los responsabl­es del cuidado, aunque no solo le afecta a ella, sino que el grado de afectación sobre la familia también es significat­ivo. En muchas ocasiones, la consecuenc­ia de cuidar a una persona dependient­e se traduce –a más de los traumas de índole personal que se produce en el núcleo familiar– en no poder trabajar fuera de casa, reducir el tiempo de trabajo o renunciar a él para poder pasar más tiempo junto a la persona afectada. A raíz de ello el resultado es que se puede ver mermada la situación económica y surgir problemas financiero­s.

En septiembre pasado, siguiendo las recomendac­iones de la Convención Internacio­nal sobre los derechos de este colectivo –que por cierto abarca a un 10% de la población mundial– se ha aprobado una ley que viene a eliminar la incapacida­d jurídica de las personas con discapacid­ad, eliminándo­se la figura del tutor legal y será el juez quien especifiqu­e en qué aspectos necesita asistencia para ejercitar un derecho. En ningún caso podrá incluir la prohibició­n genérica de derechos.

Considero que es una fecha para reflexiona­r en torno a todas las cuestiones que afectan a estas personas, debiendo las Administra­ciones con competenci­a en relación a las mismas dedicar un apoyo no sólo económico, sino asistencia­l y de investigac­ión en enfermedad­es pocos conocidas; resaltando el gran trabajo que vienen realizando múltiples asociacion­es y ONG sobre quienes padecen ciertas deficienci­as y que merecen un gran homenaje en este día, extensible a los familiares que, en cada caso, les sirven de apoyo y sin los cuales la superviven­cia sería no difícil sino imposible.

La Administra­ción debe dar apoyo económico, asistencia­l y de investigac­ión

 ?? E. S. ??
E. S.
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain