SIGNOS Y PRESAGIOS
Alo que se ve, el Día de la Constitución se ha convertido en el día de su Reforma, de modo que, salvo PP, Cs y el presidente del Gobierno, que dijo que había que cumplirla “de pe a pa”, sus socios, gente de orden, invitaban a su eliminación, a su reforma o a su olvido. A este coro trágico-festivo se añadió el señor Abascal, que también quiere reformar la Constitución, pero en sentido contrario. Todo lo cual ocurría bajo los peores auspicios; ya que, según hemos sabido, poco antes de que los reformistas hicieran piña, cruzaba el cielo de España una gigantesca bola de fuego, proviniente de Marruecos, nuestro inquieto vecino meridional. ¿Qué podrá significar este aciago meteoro en los amenes de 2021, cuando todavía no sabemos qué significa pe y dónde se halla pa en el dialecto hermético del señor Sánchez?
Últimamente se le presta mucha atención a la cuestión de los bólidos y meteoros que cruzan por encima de nuestras cabezas. Una razón elemental es que hoy contamos con mejores y más sofisticados medios para su detección. Otra no tan feliz es que, en tiempos de crisis, la gente halla presagios y heraldos del apocalipsis en cualquier parte. Nuestro querido J. J. Benítez nos tiene dicho, en entrevista reciente, que para el 2027 un asteroide impactará en la tierra (y por más señas en la bahía de Cádiz, donde él tiene casa), de modo que 1.200 millones de personas, andaluz arriba o abajo, abandonarán de inmediato este valle de lágrimas. Esto dificultará notablemente la reelección del actual alcalde de Cádiz, como parece lógico. Pero, además, nos tendrá un poco compungidos, sin que nos llegue el bañador al cuerpo, hasta que se anuncie, amistosamente, el 2028. Todo lo cual, claro, recuerda a las desdichas sin fin del siglo XVII; esto es, a la vanitas barroca y a la multitud de plagas, inundaciones y malas cosechas que azotaron el mundo, junto con los numerosos meteoros –adversos meteoros– que alumbraron aquella oscuridad sin fin.
Finalizando el siglo, Bayle escribirá sus Pensamientos diversos sobre el cometa (1682), para desmentir con paciencia esta inclinación del hombre por las señales y presagios, que lo mismo te pronostican la llegada de la Flota que una amarga derrota en Flandes. Hoy acaso nos vaticinen, otra vez, “la fin del mundo”, como decía Cunqueiro. Ahora bien, en cuanto al significado oculto del “de pe a pa” presidencial y sus posibles implicaciones ejecutivas, el benemérito Bayle no nos aclara nada. De hecho, no dice ni mu.
En cuanto al significado oculto del “de pe a pa” presidencial, el benemérito Bayle no nos aclara nada