Pedro Sánchez niega que el Gobierno esté buscando residencia al Emérito
● El presidente pide que se respete la presunción de inocencia de Juan Carlos I, que en España no es siquiera objeto de investigación ● Diferencia entre personas e instituciones
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desmentió ayer que Patrimonio Nacional esté buscando residencia al rey emérito ante su posible vuelta a España. En todo caso, Sánchez pidió respetar su presunción de inocencia sobre sus supuestos negocios irregulares en el extranjero. Recientemente, la Fiscalía suiza archivó una investigación sobre el pago de 100 millones de dólares de Arabia Saudi a Juan Carlos I.
De esta forma, Sánchez respondió, en la sesión de control en el Congreso, a la diputada de la CUP, Mireia Vehí, quien le preguntó sobre la participación del Ejecutivo de coalición en esa operación de regreso a su país de Juan Carlos I desde Emiratos Árabes. “Debe usted tener más información que yo”, replicó el presidente, quien negó que su
El presidente sostiene que le “perturban” algunas informaciones del Emérito
Ejecutivo esté buscando residencia al emérito ante la posibilidad de que pueda regresar de Abu Dabi.
A renglón seguido, Sánchez admitió que no le gustan y le “perturban” las informaciones que afectan al rey emérito porque “hacen daño” a la Casa Real, si bien llamó a respetar su presunción de inocencia sobre el archivo de unas causas que, según recordó, “en España ni tan siquiera están ahora mismo siendo objeto de una investigación”, así como la independencia del Poder Judicial. “La democracia española, con todas sus imperfecciones, es una democracia plena y es un Estado social y democrático de Derecho, y eso exige que yo respete la independencia de la Fiscalía General del Estado y del Tribunal Supremo”, manifestó el jefe del Ejecutivo, quien reclamó “máximo respeto” a la independencia del Poder Judicial.
Sánchez se afanó en alejar a Felipe VI de las conductas de su padre. “Aquí no se está juzgando, desde el punto de vista político, a una institución, que es lo que usted pretende con esta pregunta”, enfatizó el presidente. “En todo caso –prosiguió–, tendremos que recriminar o no aprobar la conducta de una determinada persona, pero no con la institución”.
Sánchez justificó que, por esa misma regla, si hubiera una caso de corrupción de algún diputado o diputada del Congreso, eso significaría que todos los políticos son corruptos. “Por tanto, estamos hablando de personas, no de instituciones”, insistió.