Pasaportes Covid falsos para viajar o salir de fiesta
Cuando en marzo de 2020 estalló la pandemia y España aguardaba con cierta credulidad la llegada de la vacuna contra el Covid, Claudia sabía que ni ella ni sus hijos, de dos y cuatro años, se la inyectarían. El miedo inicial a contagiarse pronto se transformó en una desconfianza exacerbada hacia el origen del virus y, por ende, hacia las instituciones que sirven de altavoz. Dos años después, la mujer sigue sin creer en un fármaco cuyos efectos secundarios, a largo plazo, recalca, “todavía no se conocen” y, a base de triquiñuelas, logra saltarse los controles sanitarios. Para viajar a Riviera Maya, se plantea incluso desembolsar 300 euros por la compra de un pasaporte Covid falso que, supuestamente, acredite la pauta completa de vacunación o un test negativo nunca realizado. Pero el suyo no será el primer caso. La Policía Nacional ya investiga en Málaga este tipo de fraudes y, en concreto, el protagonizado por una pareja que ofrecería certificados y a la que podrían haberle suplantado la identidad.
Fue la empresa de peritaje informático QuantiKa14 la que en diciembre puso esta posible estafa en conocimiento de los investigadores. Descubrió que la exigencia del documento sanitario que desde el 20 de diciembre es un salvoconducto para acceder al interior de bares o locales de ocio había aflorado un auténtico mercado negro. “Nos hemos encontrado de todo. Las ofertas y los precios van subiendo y bajando: van desde los 125 a los 200 euros. En Navidad ofrecían un 2x1 porque los ciberdelincuentes también tienen competencia. Muchos se han subido al carro”, explica Jorge Coronado, el CEO de la compañía.
Numerosos canales de aplicaciones de mensajería instantánea ofrecen por 300 euros la posibilidad de conseguir un certificado Covid para salir de fiesta o viajar sin haberse administrado la vacuna. El pago sólo puede hacerse con bitcoins o mediante Paypal. “El que compra el pasaporte piensa que es auténtico. Paga un módico precio por incorporar su nombre en una base de datos de Sanidad, donde aparece como vacunado, para que se lo pueda descargar”, detalla el responsable. Los ciberdelincuentes argumentan que tienen contacto “con un médico negacionista” que proporciona el acceso a ese archivo de Sanidad.