Cádiz rinde cuentas al Papa
El obispo ha culminado la visita ad limina, que no cumplimentaba desde 2014 La diócesis ha presentado al Vaticano un informe de la situación actual
El Papa Francisco ha podido conocer en estos días cuál es la situación actual de la diócesis de Cádiz y Ceuta. Una pequeña delegación gaditana encabezada por el obispo, Rafael Zornoza, ha estado esta semana en Roma para rendir cuentas ante el Vaticano, para presentar una radiografía actual de la Iglesia local, cumplimentando así la llamada ‘Visita ad limina’ que cada diócesis debe realizar cada cinco años a Roma.
Varias son las citas que desde el pasado lunes ha cumplimentado Zornoza, que ha estado en Roma junto a otros 17 obispos de las provincias eclesiásticas de Sevilla, Granada y MéridaBadajoz (es decir, los titulares
La visita ha reunido a los 18 obispos de las provincias de Sevilla, Granada y Mérida
de las diócesis de Sevilla, Cádiz y Ceuta, Huelva, Córdoba, Canarias, Tenerife, Asidonia-Jerez, Granada, Almería, Jaén, Cartagena, Málaga, Guadix, Mérida-Badajoz, Coria-Cáceres y Plasencia). Pero posiblemente lo más importante de la visita ad limina es el informe remitido sobre la situación de la diócesis.
Según explica el propio Obispado de Cádiz, se trata de un informe sobre la situación de la diócesis basado en 22 bloques distintos bajo un modelo que la Santa Sede determina para ofrecer “una información sintética y precisa de la diócesis” al mismo tiempo que servir al propio obispo “para examinar el estado de su iglesia y programar el trabajo pastoral”.
Ese informe ofrece datos estadísticos y descripciones de diferentes áreas o ámbitos en la vida de la diócesis. Desde el Obispado resumen estos 22 capítulos en “organización administrativa y pastoral; situación religiosa; ministerio del ordinario; vida litúrgica y sacramental; devoción a los santos; educación católica; datos sobre el clero y el trabajo en las parroquias; la vida consagrada; la cooperación con las misiones; el papel de los laicos; ecumenismo y diálogo con otras religiones; familia y de
fensa de la vida humana; vida cultural, medios de comunicación; caridad con los necesitados; pastoral sanitaria y con los migrantes; patrimonio artístico y cultural; situación financiera de la Diócesis”.
Todo este contenido, que ha sido elaborado durante meses y que ya en noviembre se remitió a Roma para su conocimiento y validación, ha sido presentado a lo largo de la semana en los distintos dicasterios de la Curia Romana (algo así como los ministerios del Vaticano); el de los Obispos, el de la Doctrina de la Fe, el del Clero, Institutos de Vida Consagrada, Educación
Católica, Culto Divino, Laicos, Nueva Evangelización, Familia y Vida, Promoción para el Desarrollo Humano Integral, Comunicación y la Secretaría de Estado.
Además de esta labor más administrativa o puramente de trabajo, el obispo ha tenido que realizar otra serie de acciones o ritos durante esta visita ad limina. Uno de ellos es la veneración ante la tumba de los apóstoles Pedro y Pablo, “como expresión de comunión eclesial, y el encuentro con el Papa como sucesor de san Pedro”, tal y como destaca el propio Zornoza. Otro es el encuentro personal con el Papa Francisco. Y también
ha celebrado Zornoza la eucaristía en las cuatro basílicas romanas (San Pedro, San Juan de Letrán, San Pablo y Santa María la Mayor).
El obispo de Cádiz ha estado acompañado en esta peregrinación ad limina por el Consejo Episcopal de la diócesis y el pro-vicario general y vicario judicial (Pedro Velo). Pese a realizarse cada cinco años, Zornoza no acudía a Roma a presentar el estado de la diócesis desde 2014, ya que la maquinaria burocrática de Roma y la pandemia del Covid han demorado la que puede ser última peregrinación ad limina de Zornoza a Roma.