Con todo el lujo y la sofisticación
Junto a tres versiones de gasolina y Diesel, habrá dos híbridas enchufables y hasta un eléctrico, éste en 2024
DESDE su aparición en 1970 el Range ha ligado lujo y refinamiento a unas aptitudes dinámicas excepcionales que le permitían, con naturalidad, pasar de estar circulando por campo a poder estar en la puerta de la ópera con sólo un manguerazo entre ambas situaciones.
Ahora llega la cuarta generación y esa esencia se mantiene.
Estéticamente, en lo básico, hay mucho de las anteriores generaciones en esta nueva pero con una vuelta de tuerca de sofisticacion, de minimalismo incluso. Buena prueba de ello es que su Cx es inusitadamente bajo de su carrocería de aluminio, de 0,31, un coeficiente aerodinámico que se convierte en referencia entre los SUV de gran tamaño.
Ese material y su estructura de tipo SUV le permite obtener un peso mínimo relativamente razonable: con la carrocería de 5,05 m, 2.505 kilos en los D300 y D350 con los Diesel de 3 litros que ya usan Defender, Discovery, Velar, Range Rover Sport o Jaguar F-Pace. La otra SWB de la que Range ha proporcionado datos técnicos es la P530. Se trata de la más potente disponible en, al menos, la gama de lanzamiento con el motor 4.4 de 530 CV, un V8 de origen BMW: es como el del BMW M5. Pesa 2.585 kilos.
En el caso de poner la vista sobre la carrocería larga, la LWB, de 5,25 m de longitud en configuración de cinco asientos, ese peso sería de 2.569 kilos en el caso de la versión D350 y 2.626 para el P530. Con la configuración de siete se suman 100 kilos más.
Es la primera vez que un Range Rover ofrece esas siete plazas y promete hacerlo de modo que sean realmente utilizables con el confort que se espera de un SUV de lujo como éste. Por el momento, no hemos tenido oportunidad de comprobarlo pues todas las unidades con las que hemos trabado contacto tenían cinco plazas. Tanto las de carrocería corta, la conocida como SWB y que tiene 20 cm menos de distancia entre ejes que la LWB.
Hemos tomado mediciones de una versión SWB y del habitáculo de orra LWB. Nuestra conclusión es que si bien la carrocería de 5,05 m es muy grande -su anchura, por otro lado, es de 2,05 m y la altura de 1,87- al interior no se traslada tanta amplitud. No es el caso de la anchura, con unos imponentes 1,57 y 1,51 m en las plazas delantera y traseras, respectivamente; ni tampoco de la altura disponible, pero sí del espacio longitudinal. En la práctica, es imposible sentirse agobiado por falta de espacio cuando nos sentamos atrás, pero la realidad es que de un SUV tan largo hubiésemos esperado más que en un SUV medio-grande. No obstante, para quien realmente necesite que sus pasajeros viajen holgadamente e incluso con las piernas cruzadas, ahí está la versión LWB en la que todos y cada uno de los 20 cm extras se trasladan al espacio a lo largo.
Más nos ha decepcionado el maletero, no por la posibilidad de abrirse en dos partes, ambas simultáneamente o no mediante motores; y que la inferior que queda horizontal como prolongación del suelo del espacio de carga se pueda transformar en un sillón, pero sí por el volumen disponible. Lejos de los 725 litros previstos para el de un SWB de cinco plazas, aquí nuestras mediciones dieron con 447. El volumen que la marca da para una configuración de siete asientos del LWB es de 713 litros en el caso de que se plieguen los dos últimos y de 312 si todos están en situación de usarse por ocupantes.
Como alarde de refinamiento, incluso la bandeja ocultaequipajes puede estar motorizada, al igual que lo están siempre las dos partes del portón o las puertas.
Además de los dos motores ya descritos, la gama del Range Rover estará compuesta por otro Diesel, también de seis cilindros y 3 litros, de 300 CV, ya ampliamente utilizado por la marca. Este de las versiones D300 estará, como las de las D350, microhibridado con un sistema eléctrico de 48 voltios con motor eléctricogenerador accionado por correa como apoyo del térmico.
También es ya usual en Land Rover la hibridación enchufable, presente en cuatro de los modelos y que serán cinco con estos Range cuando lleguen las versiones P440 y P510. En ambos casos el motor térmico será 3.0, un seis cilindros de gasolina -los actuales Land Rover y Range usan 2.0 de cuatro-, en los que la diferencia de potencia vendrá marcada por la de ese motor térmico.
El eléctrico de 143 CV estará alimentado por una batería de 38,2 kWh, una de las más grandes disponibles en un PHEV y que le proporcionaría energía suficiente para recorrer sin activar el motor de combustión 100 km. Podría alcanzar así los 140 km/h.
Se recargará tanto con corriente alterna con una potencia de hasta 7,2 kW, como continua hasta a 50 kW, un recurso poco usual en los PHEV. Ademas, la tracción total será mecánica ya que en los Range Rover P440 y P510 se recurrirá a un árbol de transmisión que enviará el movimiento producido por los motores situados bajo el capó al diferencial posterior, como en los Diesel o el V8.
La versión eléctrica llegará en 2024, aún sin denominación ni potencia conocida. Tampoco capacidad de su batería, si bien no debería ser de menos de 100 kWh. Como mínimo, en cada eje dispondrá de un motor eléctrico. Quizá hasta dos atrás.
La sofisticación en los nuevos Range Rover no sólo está presente en los materiales que se utilizan -incluso cerámica en algunos mandos, pero también piel semianilina o lana Kvadrat en las tapicerías y alfombrillas con hilo Econyl-, ajustes o pantallas; sino que el chasis de esta plataforma MLA-Flex es también un buen ejemplo de hasta donde alcanza ese virtuosismo técnico. Así, y al margen de esa tracción total con reductora común y bloqueo de diferencial trasero activo en todas las versiones, están presentes otros recursos como la suspensión neumática predictiva -se ajusta con los datos del navegador-, las estabilizadoras activas, las cuatro ruedas directrices… Todo englobado bajo el control del Terrain Response 2.
Tambiénse dispone de ayudas a la conducción predictivas que, por ejemplo, pueden llegar a vigilar con sus sensores 70 metros por detrás de este SUV. Forman parte de este equipo el control de velocidad de crucero adaptativo que trabaja con el control del balanceo de la carrocería.
Cuenta el Range con un sistema de cancelación activa del ruido que se apoya en el equipo de sonido Meridian de 1.600 W. Otro elemento de confort es el Cabin Air Purification Pro con filtración del aire PM2.5 y control de CO2.
Serán cinco los niveles de acabado disponibles, con el SV, el más alto, reuniendo lo que el propieterio esté dispuesto a equipar a capricho, aunque habrá tres paquetes cerrados disponibles.
El SWB más asequible, con el Diesel de 300 CV, costará 143.300 euros. 3.950 más supondrá dar el paso al D350, mientras que el P530 arranca en 157.650.
El salto a los LWB implicacontar con este último motor o el D350 -no está contemplada para el D300- sólo 4.000 euros. Si su configuración es de siete asientos, el coste es de 3.100 euros.
Seis motores, dos carrocerías y, ahora, en la larga, siete plazas