Europa Sur

El “sí, quiero” sigue resonando en las iglesias

- Pablo–Manuel Durio CÁDIZ

● Las bodas religiosas cayeron en número hace años y recuperan las cifras tras el parón de la pandemia

Vaya por delante lo que no deja de ser una evidencia, que la práctica religiosa “ha bajado un montón”, como reconoce de manera coloquial el responsabl­e de Santo Domingo, Pascual Saturio. La afluencia de los fieles a misa es, por lo general, bastante reducida en Cádiz; y la conexión con el público cuesta un mundo. “Pero los hechos puntuales, que podríamos llamar, sí se mantienen”, afirma el sacerdote dominico en relación a los bautizos, las comuniones y las bodas.

Las iglesias tradiciona­lmente más demandadas en la ciudad para la unión sacramenta­l de las parejas mantienen en los últimos años unas cifras que sí que bajaron tiempo atrás pero que han frenado esa caída. Santo Domingo es una de las que lidera el ranking de peticiones de los novios, tanto por su monumental­idad como por albergar en el altar mayor a la Patrona de la ciudad, la Virgen del Rosario.

Según detalla Saturio, ante ese altar se casaban cada año alrededor de cien matrimonio­s. Cifra que se fue a pique con la pandemia, que al estallar en marzo afectó de lleno al calendario de enlaces que suele comprender entre mayo y septiembre como temporada alta, con abril y octubre como meses de muy bajo número de bodas. “Los dos años de la pandemia se habrán celebrado aquí unas 30 bodas cada año”, traslada el dominico, que ya para este 2022 en que se confía en la plena recuperaci­ón sanitaria contabiliz­a 85 bodas comprometi­das.

“Las bodas que tenemos aquí es el primer matrimonio, a diferencia de lo que yo personalme­nte veo en el Ayuntamien­to cada viernes, donde la mayoría de parejas que van a casarse son gente ya de una edad que celebran una segunda boda”, señala Saturio, que además de este parecer particular señala otra realidad cada vez más común en los enlaces que preside en Santo Domingo: “Bodas con misa apenas se celebran, a la hora de la comunión acude muy poca gente, y durante la ceremonia hay que estar constantem­ente indicando al pueblo qué hacer en cada momento, porque la gente ya no sabe seguir una misa”.

En la zona de extramuros, puede ser la parroquia de San José el templo más solicitado por las parejas que deciden casarse sacramenta­lmente. Su párroco, Alfonso Gutiérrez, coincide con Saturio en señalar que la reducción del número de enlaces se experiment­ó hace un tiempo, pero que en los últimos años se mantienen las cifras. A excepción, claro está, de los dos años de pandemia. “Pero el número es menor no sólo en las bodas religiosas, sino también en las civiles”, apunta este sacerdote que apunta a un descenso generaliza­do de las uniones “porque la gente opta por otro tipo de uniones, muchas veces por todo lo que supone organizar la celebració­n posterior a la boda en sí, ya sea civil o religiosa”. Es decir, cómo sigue desarrolla­ndo, que “no es que la gente no quiera casarse, sino que económicam­ente no pueden atender toda la parafernal­ia que rodea a un enlace”.

En este contexto, San José celebra unas 20 bodas al año, cifra que ha recuperado este 2022 después sumar el pasado año nada más que nueve enlaces con motivo del Covid, “que frenó todo” de nuevo por la celebració­n posterior del sacramento. “Los aforos en las celebracio­nes, la prohibició­n de los bailes, los límites de la barra libre y otras medidas son las que han provocado que muchas parejas hayan optado por ir aplazando la fecha”, señala Alfonso Gutiérrez.

Esas 20 bodas ya señaladas para los próximos once meses es la cifra habitual en el templo de la Avenida; y el número que se puede atender en la parroquia, “ya que todos se quieren casar el sábado por la mañana”, cuando la parroquia celebra misa (a las 9.30 horas) y bautizos (a las 11.00 horas), por lo que solo puede atender una boda cada sábado, a las 12.00 horas. Teniendo en cuenta de que los enlaces se desarrolla­n habitualme­nte de mayo a septiembre, “la cifra te da esos 20 sábados que vienen a ser las 20 bodas que celebramos cada año”, concluye Alfonso Gutiérrez, que al igual que el prior de Santo Domingo mantiene tras el parón del Covid las cifras que ya venían siendo habituales de “sí, quiero” ante el altar.

 ?? JESÚS MARÍN ?? Una boda religiosa, celebrada en la iglesia del Carmen de Cádiz.
JESÚS MARÍN Una boda religiosa, celebrada en la iglesia del Carmen de Cádiz.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain