Mas augura el fiasco de ERC en la mesa de diálogo
● El ex ‘president’ considera que JxCat debe “definir mejor” sus liderazgos, como Esquerra con Aragonès y el PSC con Illa
El ex presidente de la Generalitat Artur Mas consideró que la mesa de diálogo entre el Govern yel Ejecutivo central será una decepción que “en este caso, correrá a cargo de ERC, que es quien ha encabezado con más fuerza” esta iniciativa. En una entrevista en el diario VilaWeb, Mas defendió que la mesa de diálogo “no tiene recorrido ni futuro para lo que se creó: encontrar una solución para el conflicto que existe entre Cataluña y el Estado español”.
Acusó a las partes implicadas de no ser capaces ni de reunir a la mesa y criticó que “las pocas veces que la han reunido no había orden del día, ni ha tenido continuidad”, por lo que dijo textualmente que es un “engaño” que sólo permite que el tiempo pase.
A su juicio, hoy dentro del independentismo “no hay unidad, no hay proyecto estratégico conjunto, hay una carencia de rumbo y de norte”, y subrayó que existe una fragmentación política en el Parlament que dificulta la creación de liderazgos consolidados. Afirmó que Junts está en fase de “construcción y de consolidación, pero todavía con cierta indefinición ideológica y con algunos deberes pendientes como definir cuáles son los liderazgos de partido y los institucionales”, y lo ejemplificó con los de Salvador Illa en el PSC y de Pere Aragonès en ERC.
Sostuvo que “estas indefiniciones” se deberán ir resolviendo en los próximos meses porque considera que es muy importante que cada proyecto político tenga definidos sus líderes.
Preguntado por su relación con el ex presidente catalán y líder de Junts, Carles Puigdemont, respondió que mantienen “una muy buena relación personal que nunca se ha roto, en absoluto, al revés”, y que pretende volver a visitarlo a Waterloo en pocas semanas.
Apuntó que no entrará en Centrem, la nueva marca política que impulsa la ex secretaria del PDeCAT Àngels Chacón, ni en otro partido: “Mi vida política como militante de partido ha terminado”. “No quiero alejarme de la política, pero sí de la militancia en partidos”, dijo, porque es una etapa a la que ha dedicado más de 30 años y que ya da por concluida.
Sobre el caso del ex diputado de la CUP Pau Juvillà, tachó de monstruosidad que un organismo administrativo como la Junta Electoral Central pueda retirarle el escaño a un cargo electo.