Un jurado popular declara a la madre de la niña Desirée culpable de su muerte
Las acusaciones reclaman prisión permanente revisable para la progenitora
El jurado popular del caso de Desirée Leal, de 7 años, emitió ayer su veredicto, menos de 24 horas después del término de la vista, y consideró acreditado por unanimidad que Ana Sandamil, conocedora de que el padre de la niña, su ex José Manuel Leal, quería la custodia compartida, mató a la hija de ambos.
En la Audiencia Provincial de Lugo se dio lectura al dictamen, del que la juez del caso tuvo conocimiento a las 11:00, cuando se le comunicó que había una resolución, la cual consideró “correcta”, al expresar con claridad y de manera fundada “el parecer” de sus miembros. Concordaron en que el 3 de mayo de 2019 la acusada suministró un antidepresivo –Trazodona– a la víctima, a la que asfixió con sus manos, y que la menor llegó a despertarse y a resistirse pero sin posibilidad alguna de defensa.
Así, los jurados defendieron que Desi, como la conocían en su círculo íntimo, falleció por compresión y oclusión de sus orificios respiratorios en la habitación compartida de la casa de Muimenta (Lugo) en la que convivían la chiquilla, su progenitora y presunta responsable de este crimen y la abuela materna, María Novo, la persona que aquella mañana avisó a Emergencias de que la cría no respiraba.
El tribunal popular también expresó su convencimiento de que Ana Sandamil buceó en internet para buscar en las semanas previas un veneno, la estricnina; y, sobre todo, la parte más importante y que abre las puertas a la condena a prisión permanente revisable que demandan las acusaciones: que su enfermedad de base, un trastorno de personalidad, afectaba “parcialmente y no de forma importante” a su mente.