La UE elude asociar el consumo moderado de vino con el cáncer
● Matiza la propuesta que equiparaba el alcohol al tabaco como factor de riesgo ● Consejo Regulador: “Un borracho es la peor publicidad que pueden tener nuestros vinos y brandies”
El sector del vino de Jerez lo veía un disparate y la mayoría de los eurodiputados le ha dado la razón. El Parlamento Europeo (PE) ha rechazado equiparar las bebidas alcohólicas con el tabaco, incluido el vino, en contra de la propuesta presentada por la Comisión Especial de Lucha contra el Cáncer (BECA), que entre otras medidas, defendía la incorporación de advertencias sanitarias al etiquetado sobre los riesgos cancerígenos de su consumo.
Durante la votación, cuyo resultado se dio a conocer ayer, los europarlamentarios introdujeron cuatro enmiendas que matizan el informe final de la Comisión de Lucha contra el Cáncer, para precisar que el consumo “nocivo” de alcohol y no todo el consumo puede ser un factor de riesgo para el desarrollo de esta enfermedad.
El matiz es muy importante, toda vez que, como esgrime el Consejo Regulador del jerez, otros muchos estudios científicos avalan el consumo moderado de vino, asociado además a la dieta mediterránea y a sus beneficios para la salud.
Una enmienda del PP y Vox, apoyada por una amplia mayoría de los europarlamentarios españoles -sólo han votado en contra los diputados de JxCat, ERC Catalunya e Comú, Bildu y parte de la delegación del PSOE- evita que el consumo excesivo de alcohol se equipare al moderado en el texto aprobado por una amplia mayoría de la Cámara, que finalmente indica que el consumo “nocivo” de alcohol constituye un factor de riesgo para muchos tipos de cáncer.
En lugar de incorporar las advertencias sanitarias al etiquetado, el PE se inclina por incluir información sobre el consumo moderado y responsable, al tiempo que se sustituye la referencia a que “no existe un nivel de consumo seguro” por “el nivel más seguro de consumo es ninguno”.
En relación a este punto, el Consejo Regulador del vino de Jerez ya advirtió en su día de la gravedad del ‘informe Beca’, cuyo texto inicial demonizaba el consumo del alcohol en general -ya fueran destilados, vinos o cervezas- desde la primera gota y avalaba “la suposición de que no hay un nivel seguro” pese a los beneficios que se atribuyen al consumo moderado del vino.
Precisamente, el presidente de la institución jerezana del vino, César Saldaña, valoró ayer la introducción de las enmiendas a “un primer texto que era extremo” y que se vuelva a hablar de “moderación”, pues “es evidente que hay que luchar contra el cáncer, es evidente que hay que luchar contra las enfermedades, es evidente que hay que promulgar una vida sana, pero en esa vida sana tienen cabida nuestros productos”.
En declaraciones a los medios durante un acto celebrado en la Casa del Vino, el presidente del Consejo defendió el consumo “en su justa medida, como parte de la dieta mediterránea, en la que el vino es un alimento”, si bien puntualizó que, al tener alcohol, “ya sabemos los menores no lo pueden tocar y que los mayores tienen que tomarlo con moderación..., lo que llevamos años diciendo porque, además, un borracho es la peor publicidad que pueden tener nuestros productos”.
El presidente del Consejo recordó que la industria “cerró filas” ante la posibilidad de que se adoptasen “medidas drásticas que pueden terminar con una actividad tan importante como es la producción de bebidas alcohólicas, importantísima para nuestra comarca, para España y para un montón de países de la Unión Europea” y abogó por la educación para fomentar el consumo moderado.