Carla Simón hace historia con ‘Alcarràs’ y logra el Oso de Oro
● Hacía casi 40 años, desde el triunfo de Mario Camus en 1983, que un cineasta español no se llevaba el máximo galardón en la Berlinale
La Berlinale cerró su 72 edición con la entrega de sus premios, en los que la película española Alcarràs, dirigida por Carla Simón, se alzó con el Oso de Oro, una cinta que retrata a una familia de melocotoneros catalanes, exponente de la lucha de todo pequeño agricultor, el amor a la tierra y la desolación ante la que será su última cosecha.
Simón, quien regresaba al festival tras haber ganado en 2017 el premio a la mejor opera prima de la Berlinale con Verano 1993, dedicó el máximo galardón a todos los pequeños agricultores que, como los de su filme, luchan por la supervivencia.
El jurado de la Berlinale, presidido por el director indio-estadounidense M. Night Shyamalan, valoró en la película la ternura que Simón imprimió a sus personajes, en una cinta interpretada por actores no profesionales con los que la directora creó una auténtica familia. Hacía casi 40 años que un cineasta español no se hacía con el Oso de Oro, desde 1983, cuando Mario Camus lo consiguió por La colmena, dos años después de que Carlos Saura conquistara el mismo galardón por Deprisa, deprisa.
La realizadora dijo al recoger el premio que se considera “hija de este lugar”, la Berlinale, donde en 2017 ganó el premio a la mejor ópera prima por Verano 1993. Es “mi hogar del cine”, aseguró, y bromeó con mudarse a Berlín, ya que cada vez que acude al festival “ocurre algo especial”.
Simón dio las gracias a su equipo, al “maravilloso” elenco de actores no profesionales que “dieron y pusieron su alma” en esta película, y a su familia, que cultiva melocotones en Alcarràs y le ha servido de inspiración. La directora dedicó el premio a “las pequeñas familias de agricultores que cultivan la tierra cada día para que esta fruta llegue a nuestros platos”.
En Alcarràs, la familia Solé se reúne después de décadas cultivando las mismas tierras, para realizar la que probablemente sea su última cosecha, ya que, tras la muerte del propietario de las mismas, su hijo quiere arrancar los árboles para dedicar el terreno a un negocio más lucrativo: la instalación de paneles solares.
Mientras algunos de los miembros de la familia Solé se resisten a la idea, otros creen que no queda otra que encajar lo mejor posible la nueva situación, unas posturas antagónicas que derivan en una crisis familiar.
En el palmarés del festival, el Gran Premio del Jurado fue para el surcoreano Hong Sangsoo, por The Novelist’s Film, una película tejida sobre reencuentros y la relación que nace entre una escritora de éxito y una actriz.
El Oso de Plata del Jurado fue para la mexicano-boliviana Natalia López Gallardo, por su producción mexicano-argentina Manto de Gemas.
Asimismo, la Plata a la mejor dirección la ganó la francesa Claire Denis, por Avec amour et acharnement, mientras que la correspondiente a la mejor interpretación fue para la germanoturca Meltem Kaptan por Rabuye Kurnaz versus George W. Bush,
El jurado dirigido por Shyamalan valoró la ternura con que Simón retrata a sus personajes
dirigida por el alemán Andreas Dresen.
Los premios del jurado internacional cerraron la competición de la Berlinale, que regresó con esta edición al formato presencial, tras haber quedado limitado a lo meramente virtual el año pasado por imperativos de la pandemia. Se celebró, sin embargo, bajo estrictas medidas, ya que Alemania atraviesa aún una fase de fuerte incidencia de contagios derivados de la variante ómicron.
La asistencia a los pases o conferencias de prensa sólo era posible para los representantes de los medios acreditados con la pauta completa de la vacunación más un test diario negativo, también para quienes tenían la dosis de refresco.
La actriz francesa Isabelle Huppert no pudo acudir a Berlín para recoger el Oso de Oro de Honor al conjunto de su carrera, por haber dado positivo de Covid la víspera de la gala prevista para ese homenaje, que siguió de forma virtual desde París.