Apoteosis de Mechaal
● Doblete tras imponerse también en el 1.500 con claridad ● Resurrección de Bruno Hortelano y primera derrota de Ortega ante Asier Martínez
Adel Mechaal remató su tercer doblete nacional en pista cubierta con una gran exhibición en la final de 1.500, Bruno Hortelano resucitó con su primer título de 400 y el subcampeón olímpico Orlando Ortega, batido por Asier Martínez y Enrique Llopis en 60 m vallas, sufrió la primera derrota de su vida frente a otro atleta español, en la clausura de los campeonatos de España.
La mediática Ana Peleteiro, medallista de bronce olímpica en Tokio, igualó los siete títulos nacionales de Patricia Sarrapio en triple salto. La gallega es tan superior a sus rivales que el desenlace estaba cantado. Venció con 14,08 pero también lo hubiera hecho con cualquiera de sus cuatro saltos válidos. La eterna Sarrapio, de 39 años, fue segunda con 13.46.
Catorce horas después de obtener el título de 3.000 con absoluta superioridad, Mechaal afrontaba un reto más complicado en el 1.500, con rivales rápidos capaces de presentarle batalla en un hipotético esprint, de ahí que tomara la cabeza desde el disparo de salida y cubriera el primer 500 en un rápido parcial de 1:10.
Ignacio Fontes se pegó a su espalda, Kevin López se retiró y
Adel no cejó en su empeño. Al contrario, redobló su ataque a 400 del final, abrió más hueco y venció, pese a pararse en la recta, con la mejor marca jamás conseguida en unos campeonatos de España bajo techo: 3:36.89.
Era su tercer doblete 1.5003.000 en campeonatos de España en pista cubierta y el quinto en total. Fontes (3:37.81) y Saúl Ordóñez (3:39.18) formaron con Mechaal un podio de mucha categoría. “Tenía rivales muy rápidos, no podía dejarlos que llegaran frescos al último 400, así que decidí castigarlos desde la salida. Para el Mundial de Belgrado quiero hacer el 3.000 porque es un reto ilusionante, con tantos etíopes. Pero el 1.500 me encanta y lo dejo para el verano”, comentó Mechaal.
La jornada del sábado había terminado con un récord espectacular de Maribel Pérez en 60 lisos (7,16), el segundo que batía en hora y media, que la situaba sexta de Europa y decimoctava del mundo este año. El programa dominical ofrecía en la pista hidráulica de Expourense un suculento menú de grandes duelos en busca de las dos plazas disponibles por prueba para los Mundiales en pista cubierta de Belgrado.
El primer choque de trenes se produjo en el 1.500 femenino, con la gerundense Esther Guerrero defendiendo título frente a la finalista olímpica Marta Pérez.
Esther tiró a reventar, llevándose a Marta y a Águeda Muñoz, y en pleno esprint sufrió un tirón en los isquios que la dejó fuera de la lucha. Cuatro años después, la soriana recuperó el título con una marca de 4:25.42, Águeda fue segunda con 4:25.52 y Guerrero, campeona los tres últimos años, acabó tercera, renqueante, con 4:25.82.
Álvaro de Arriba, campeón de Europa de 800, revalidó su título batiendo con un crono de 1:49.26 al líder mundial del año, el murciano Mariano (1:49.34), que llegó algo retrasado a la última recta, sin espacio para imponer su mejor final. Se había pasado el 400 en 57.99, con un cambio de Pablo Sánchez Valladares que produjo fricciones. El salmantino se pegó a él para batirlo en el último 100, mientras por detrás el gallego Adrián Ben progresaba hasta el tercer puesto (1:49.50).
El 400 masculino, con cinco de los nueve españoles más rápidos de todos los tiempos, ofrecía la novedad de Bruno Hortelano, plusmarquista español de 100, 200 y 400 al aire libre, compitiendo en esta distancia bajo techo. Bruno ganó la calle libre y aguantó hasta el final la posición para vencer con 46.02.
Orlando Ortega, plata olímpica en Río 2016, nunca había perdido en vallas contra otro español. Lo hizo por partida doble y no estará en el Mundial de Belgrado. El navarro Asier Martínez fue el más rápido (7.56), delante de Quique Llopis (7.61) y el propio Ortega (7.65).